Unicaja

Alberto Díaz: "Salimos con un lenguaje corporal no apto para una semifinal"

Alberto Díaz, en el UCAM Murcia - Unicaja

Alberto Díaz, en el UCAM Murcia - Unicaja / FIBA

El Unicaja sufrió de lo lindo ante el UCAM Murcia en la semifinal de la Final Four de la BCL que se disputa en Belgrado. Al término del encuentro, el capitán cajista, Alberto Díaz, hizo su particular valoración de lo que sucedió en el arranque, en el que los de Sito Alonso doblegaron a los malagueños. Coincide en parte con la lectura de Barreiro, que también habló.

"La energía. En la primera parte ellos han sido más duros y fuertes que nosotros, hemos salido con un lenguaje corporal no apto para una semifinal. En el descanso hemos sido claros en el vestuario, teníamos que cambiar nuestra energía y ha sido el cambio del partido”, comentaba Díaz en los micrófonos de 101 Televisión Málaga, que ofreció los dos partidos en directo.

Dentro de las explicaciones que se le ocurren al internacional malagueño, entiende que no es fácil afrontar un partido de estas características. "Entras en una semifinal, pabellón nuevo, ambiente diferente. La afición es verdad que nos ha ayudado muchísimo y hay que agradecérselo. Entras con ese nerviosismo, esas ganas de hacerlo bien. Me encantaría tener la razón concreta, pero cada uno tendrá su sensación y lo importante es que como equipo lo hemos sacado adelante”, aseguró.

Palabras de Barreiro

El gallego también hizo su particular análisis de lo que pasó en la pista serbia: "No teníamos que olvidarnos de las cosas que nos trajeron aquí desde el partido uno. Teníamos que ubicarnos un poco. Murcia empezó muy fuerte, muy físico, y con eso tuvimos algunas pequeñas lagunas, pero bueno, al final volvimos a nuestra identidad, a lo que nos trajo aquí y pudimos ganar el partido”.

Ya esperaban que fuese una cita con mayor dureza que en la competición doméstica: "En Europa siempre te dejan jugar más físico, con más contacto, y al final teníamos que adaptarnos a eso. Creo que lo hicimos bien durante el partido. Supimos esperar nuestro momento. Es difícil aguantarnos 40 minutos a nuestro ritmo. Al último cuarto llegamos bien y nos llevamos el partido a base de trabajo”.

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