Cien suelas de caucho desgastadas suman cientos de miles de kilómetros (y horas y experiencias) en la iglesia de Santa María de Tarifa. Son un símbolo y un resumen, el de las vivencias de las 280,6 millones de personas que residían el pasado año en países diferentes al de su nacimiento, 82,4 millones de ellas desplazadas forzosas a causa de la violencia, las guerras, el hambre o los devastadores efectos del cambio climático (datos de Acnur). Millones de personas que dejan atrás sus hogares y familias en un éxodo que tiene en el Estrecho de Gibraltar uno de sus puntos clave en el Mediterráneo. A ellas se dedica la exposición colectiva que albergan los muros del castillo de Guzmán el Bueno, en Tarifa, 28 obras que reflejan diferentes perspectivas de un fenómeno global y eterno.

El proyecto Éxodo. Inmigración y cambio climático reúne obras pictóricas, esculturas e instalaciones que reflejan las miradas de 28 artistas contemporáneos del Campo de Gibraltar, otras provincias y de Gibraltar sobre la inmigración y sus causas, una de ellas, que se prevé que vaya al alza, el impacto del cambio climático y sus efectos en los territorios de origen. Múltiples técnicas y formatos, diferentes generaciones, algunas obras creadas ex profeso para esta muestra y otras que forman parte del fondo de sus autores. Un compendio que los comisarios, Pepe Barroso y Javier Machimbarrena, han intentado que sea “equilibrado” dentro de las limitaciones de espacio. El mensaje se extiende al lugar escogido para la exposición, Tarifa, que durante décadas ha abierto los brazos a miles de esos migrantes.

Tarifeños son algunos de los nombres destacados que ocupan la sala de exposiciones, de proyección nacional e internacional. Guillermo Pérez Villalta, Chema Cobo y Antonio Rojas cuelgan en la sala de exposiciones del Castillo sus Las Tardes del Estío, Southvenir 1991 y Nuevo Orden Mundial. Muy cerca de esta última, una composición de edificio-patera con concertinas recortadas en el cielo, se sitúa la obra de Santiago Ydañez, Dame Veneno. La meticulosidad de Paco Mármol y Magdalena Bachiller, los hombres quemados como alegato ante el calentamiento global de Ismael Pinteño, el óleo con poema de Manuel Cano, las obras se suceden en la estrecha galería del Castillo, llena esta mañana con muchos de los artistas y sus familiares y amigos durante la inauguración de la muestra.

'Ubi simus, et ubi nos ire', de Paco Sanguino.

Fuera, en un espacio al aire libre, reciben al visitante Terminus y Alhudud, dos grandes piezas de acero cortén con las que Lucas Prior refleja en el interior del Castillo la frontera que en el exterior representa el Estrecho de Gibraltar. Al lado, el grupo escultórico de pastas cerámicas de Juan Antonio Sangil recuerda las similitudes entre personas diferentes.

El tercer espacio ocupado por la exposición es la iglesia de Santa María. En el altar, una proyección llama la atención del visitante, que se posa después a los pies para descubrir la palabra Hope formada por unos maceteros. De ellos irán brotando tallos para dar vida a la esperanza en una instalación de Alan Pérez. Las 100 vivencias de Miguel Ángel Valencia reflejadas en las cien suelas de caucho y La Gran Marea de Jim Rattenbury completan esta zona.

Escultura de Lucas Prior en la exposición 'Éxodo. Inmigración y cambio climático'.

La muestra es el resultado de dos años de trabajo de los comisarios. Nació con la intención de recordar y concienciar, de “la necesidad de sensibilizar a la gente sobre la inmigración y el cambio climático”, ha destacado Pepe Barroso durante su inauguración. Se contactó con los artistas, se empezó a trabajar, pero la llegada de la pandemia dejó paralizada la colectiva hasta bien entrado este año. Se retomó la idea y se contactó de nuevo con los artistas, la mayoría aún dispuestos a participar y a los que los comisarios agradecen su disposición. “Muchos de ellos se han salido de su línea de trabajo habitual para ajustarse al tema y formato de la exposición”, explica Machimbarrena.

Listado de participantes en Éxodo. Inmigración y cambio climático.

La idea tomó impulso con el apoyo del Ayuntamiento de Tarifa y la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar y el patrocinio privado de Metrovacesa y el hotel La Residencia Puerto Tarifa y los edificios Ventura. El germen partía del Instituto de Estudios Campogibraltareños, cuya sección 3 de Artes Plásticas encabezan los dos comisarios. Y finalmente se ha concretado en una muestra que podrá visitarse de forma gratuita hasta el próximo día 20 de octubre en el castillo, de lunes a miércoles (10-15:15).

“Para hablar de migraciones y de cambio climático no hay otro sitio mejor que Tarifa, por eso teníamos claro que este era el sitio de la exposición”, ha destacado durante la inauguración el alcalde tarifeño, Francisco Ruiz. Aunque no será el único: según ha explicado el presidente de la Mancomunidad, Juan Lozano, “estamos trabajando para que la muestra sea itinerante, trasladarla a otros puntos de la provincia o fuera, quizás a Gibraltar”.

La exposición se completa con dos actividades: un espectáculo este domingo 3 a cargo del grupo Tambora (música y danza) a las 20:30 en el teatro Alameda, de entrada gratuita. Y una mesa redonda el viernes 15 de octubre (11:30, Casa de la Cultura) entre el fotoperiodista Marcos Moreno, el investigador en inmigración José Carlos Cabrera y el escritor y periodista Juan José Téllez, en la que narrarán sus experiencias y en la que participarán los propios migrantes. También de entrada libre.

Inauguración de la exposición 'Éxodo. Inmigración y cambio climático'.