Vicente es un chaval de once años, tímido, observador, algo retraído, miedoso, bajito, emocionalmente inestable, el antihéroe perfecto. Él nos cuenta su nueva mudanza. Nuevo barrio, nuevo colegio, nuevos compañeros, ¿nuevos amigos? Tiene poca estrella, pero Vicente es el gran héroe de esta aventura.

¡Qué importante es el primer capítulo en cualquier historia! El primer capítulo de Los protectores es una mudanza, ¿una más de las muchas que ha realizado? Pues no, es un gran equívoco, creando situaciones divertidas, pero a la vez una pésima presentación en sociedad para el pobre Vicente.

La novela está narrada en primera persona por Vicente, identificándose con él rápidamente los jóvenes lectores. Los problemas en los que se va metiendo el protagonista van aumentando por no saber decir “no”. Son treinta capítulos que corren con la misma velocidad que las motocicletas de Los Apaches, los gamberros del barrio, a quienes todos temen, incluso el profesorado del colegio Francisco de Quevedo. No los pueden controlar ni la Policía Local.

La trama principal es el vandalismo juvenil, atractivo mundo en el que muchos jóvenes pueden entrar por diversión, por imitación, para sentirse alguien importante dentro de un grupo. Frente a este camino están Los Protectores: Fito, Bárbara, Palmira, Ayón y Jesús María. Vicente tendrá que elegir ente Apaches y Protectores. En esta aventura también tenemos una misteriosa especulación urbanística.

En la historia tenemos un mosaico de personajes que le dan una chispa divertida a la trama: El Quesadilla, profesor de Matemáticas y pretendiente del pobre Vicente; Margarita, dos veces la directora; Gerónimo, el líder de Los Apaches, y Cochise, su mano derecha; los distintos miembros de Los Protectores: la madre y la hermana de Vicente, El Flequillo, la Señora Hodson, Tao Fujian, etc. La novela está narrada de una forma muy cinematográfica. Los jóvenes lectores ven toda la trama con gran facilidad. Para jóvenes lectores y para los que se siguen sintiendo jóvenes.

El madrileño Roberto Santiago, escritor, guionista, director de cine y dramaturgo es la prueba viva de que en España se puede vivir de la literatura juvenil. Tiene dos sagas que son superventas entre los jóvenes lectores: Futbolísimos y Los Forasteros del Tiempo. Los Futbolísimos, adaptada tanto al teatro como al cine, ha sido la colección de literatura infantil más vendida en España en los últimos años. Tengo la completa seguridad que Los Protectores también se convertirá en una serie con gran éxito. Tanto Vicente como Bárbara tienen aventuras para largo. Ana es su primera novela para adultos.

Ficha literaria: Los protectores. Autor: Roberto Santiago. Ilustraciones: Paula Blumen. Premio El Barco de Vapor de literatura infantil. Editorial: SM (Madrid)