La Unión ya tiene por fin a su ansiado delantero. Se trata de Javier Henares Payo, conocido futbolísticamente como Henares, un atacante malagueño de 24 años (17/01/1985, 1,79 y 72 kilos) que procede del Alhaurino, equipo del grupo noveno de Tercera división.

El ariete no tenía equipo al comienzo de la temporada y se enroló en el conjunto malagueño con la condición de que le dejase salir si le llegaba una oferta suculenta, por lo que la directiva no ha puesto ninguna pega en darle la baja. El futbolista estuvo ayer esen Los Barrios para firmar su contrato y mañana se incorporará a los entrenamientos con su nuevo equipo, aunque no podrá jugar el domingo porque tiene que cumplir sanción tras ver el pasado domingo su quinta amarilla.

El nuevo atacante gualdiverde estaba siendo pieza fundamental en el Alhaurino, que desde su llegada inició el vuelo gracias a los siete tantos que ha marcado en los once partidos que ha disputado.

Henares también tiene experiencia en el grupo décimo, ya que la temporada pasada militó en el Arcos, y aunque realizó una buena campaña -anotó diez goles a pesar de que llegó con el curso ya iniciado- no pudo evitar el descenso del cuadro arcense.

El delantero se crió en la cantera del Málaga, llegando a conseguir el título de Liga en la División de Honor juvenil. Su primer equipo como sénior fue el Alhaurino (2004/05) y a partir de entonces cuenta con una dilatada trayectoria a pesar de su juventud. Albacete B, Jerez de los Caballeros (ambos en Tercera) y el conjunto escocés Hamilton Accies, de la Segunda división, son el resto de clubes por los que ha pasado, dejando en todos ellos su sello de goleador.

El ariete tendrá el reto de hacer olvidar a Iván Moreno, que se fue al Varea como pichichi del conjunto gualdiverde gracias a sus siete dianas, aunque ya lo ha igualado Añón y Pacheta está a un gol de hacerlo.

Con esta incorporación la Unión pone punto final al culebrón en el que se había convertido el fichaje de un delantero para cubrir la plaza vacante que dejó el ariete riojano. Primero el argentino Bordi dio la espantada a última hora cuando lo tenía todo hecho debido a una oferta del Baza, que cumplía con unos requisitos familiares; mientras que Sergio Molina, alternativa que estaba barajando la directiva barreña y por el que en 2006 ya se interesaron los barreños, no recibió la baja del Granada 74.