Ambos colectivos recuerdan que se dirigieron a principios de mayo a la Delegación Territorial de Desarrollo Sostenible en Cádiz alertando de un rebrote de esta oruga y solicitando que se informara de las medidas preventivas que se habían tomado para controlar la plaga, así como de las que se iban a tomar para minimizar males mayores y controlar su expansión. La Junta anunció un tratamiento para su aplicación desde mediados de mayo.

"A día de hoy la plaga de la oruga ya se encuentra desfoliando nuestros bosques y poniendo en riesgo a los vecinos de las zonas colindantes con los montes afectados, todo ello sin que la organización conservacionista haya recibido respuesta a la petición de información", según los ecologistas.

Los ecologistas reiteran la petición de información y piden saber si se va a fumigar con medios aéreos los núcleos urbanos cercanos a las zonas afectadas, cómo se va a actuar en las zonas de Pelayo, El Cuartón, Ahumada, Caheruela, Benharás así como si la fumigación en estas zonas será con productos químicos.

Agaden también pide que se prohíba el descorche en todas las fincas afectadas en la presente temporada, al mismo tiempo que valoran la actuación de la Junta como tardía al encontrarse las orugas adultas, donde apenas le va a afectar los tratamientos “biológicos” con Bacillus thuringiensis de las que hablan los técnicos.

"La muerte y debilitamiento de muchos alcornoques de nuestra zona, debido a la expansión de la lagarta peluda, se suma a varios miles de árboles ya afectados por la seca y por esta plaga en años anteriores; hecho que por desgracia, está reduciendo a marchas aceleradas la masa forestal de nuestros parques naturales", concluyen.