Vigilancia Aduanera ha incorporado dos embarcaciones semirrígidas rápidas para reforzar la lucha contra el contrabando en el Estrecho y la Bahía de Algeciras. La llegada de los barcos, de nombre Félix II y Félix III, va a suponer "un importante punto de inflexión en las actuaciones contra el narcotráfico por la mayor versatilidad que aportan", según explicaron ayer en el puerto algecireño el delegado especial de la Agencia Tributaria en Andalucía, Jorge Ramírez, y el director adjunto de Vigilancia Aduanera, Ángel Delgado.

Las lanchas, de 11 y 12 metros de eslora, poseen tres motores fueraborda cada una que les dan la capacidad -en condiciones de mar en calma, con los cuatro tripulantes y los tanques de combustible y agua llenos- de alcanzar los 60 nudos (unos 111 kilómetros por hora).

Aunque -según explica la Agencia Tributaria- estas nuevas embarcaciones sirven para igualar las fuerzas "habida cuenta de su gran movilidad y rapidez en la detección y persecucución" de los narcotraficantes, en el Estrecho han sido incautadas lanchas con cinco motores dedicadas a cruzar con droga que son todavía más veloces que las de Aduanas, sobre todo si no viajan con carga.

Según explicó Ángel Delgado, los barcos, que han costado algo más de un millón de euros, se enmarcan en una "línea de inversión que se prolongará en el tiempo que llevará a incorporar más medios".

La Félix I y Félix II ya se han estrenado con la aprehensión el pasado jueves de 24 cajas de tabaco y la detención de cuatro personas tras una persecución en La Atunara (La Línea). Jorge Ramírez explicó, durante la presentación de los barcos, que la Agencia Tributaria cuadruplicó en 2017 respecto al año anterior la cantidad de cocaína intervenida en Andalucía hasta alcanzar las 13,3 toneladas, lo que supone el 42% del total aprehendido en España. Además triplicó las incautaciones de hachís, de 41 a 113 toneladas, lo que supone el 87% del total nacional. Ramírez destacó la operación Nativity, que permitió la aprehensión de casi seis toneladas de cocaína en Algeciras y que no llegaran al mercado 120 millones de dosis que podrían haber alcanzado un valor cercano a los 2.000 millones de euros.

El delegado especial de la Agencia tributaria se refirió a la intensificación del control en puertos y aeropuertos para combatir el llamado rip-off o gancho perdido. Así se llama a cuando los narcos camuflan la droga entre el tráfico comercial ordinario -sin conocimiento del operador de contenedores- para ser retirada en el puerto de llegada sin dejar huella.

En cuanto al tabaco, Ramírez explicó que la Agencia tributria ha detectado un aumento de la importación por parte de Gibraltar (de 55 millones de cajetillas en 2015 a 72 millones en 2017) lo que ha devenido en un aumento de las aprehensiones, que en el Campo de Gibraltar ha sido de un 58%. En Andalucía, los agentes de Aduanas se incautaron de 4,5 millones de cajetillas y más de 70 toneladas de picadura, lo que supone el 54% y el 63% del total nacional.

El incremento de las incautaciones de droga y tabaco se debe, explicó Ángel Delgado, al dispositivo especial de refuerzo desplegado desde julio a octubre en el Estrecho, un área que concentra un volumen de navegación cinco veces superior al resto de Andalucía. Este Plan Especial permitió movilizar hasta 10 embarcaciones, entre patrulleros de altura y lanchas rápidas, además tres helicópteros, 40 efectivos y 20 vehículos, llegados de otros puntos como Cataluña y Baleares. En la Unidad de Algeciras ha estado el 10% del total de agentes de Andalucía. En 2018, la Agencia tributaria prevé incluso ampliar este plan.

En el apartado de nuevos medios y recursos para 2018 ocupa un capítulo importante la propuesta del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales de revisión del régimen jurídico para prohibir el uso de estas embarcaciones, de modo que puedan ser incautadas, incluso en tierra, con independencia si transportan o no alguna carga ilícita. En la actualidad solo existe un borrador de esta nueva normativa.