Acaip-UGT denuncia que tres internos de la prisión de Botafuegos, en Algeciras, sufrieron el pasado viernes por la tarde una sobredosis. Según explica el sindicato, sobre las 16:00, cuando todos los internos del módulo estaban en el patio porque se estaban desinfectando las celdas, los funcionarios de servicio vieron a uno de ellos que se había desvanecido, por lo que de inmediato fue trasladado a la enfermería de la prisión. Minutos más tarde también observan a su hermano con los mismos síntomas y color amoratado, por lo que también fue llevado a la enfermería. Allí ambos reconocieron que habían consumido heroína y hachís.

Ante esta situación, los funcionarios extremaron la vigilancia y vieron a otro interno con síntomas de estar intoxicado. Tras ser trasladado a la enfermería, también reconoció haber consumido las mismas sustancias, propiedad de uno de ellos, que había comunicado esa mañana con su pareja. Dos de los internos quedaron en observación y uno fue trasladado en ambulancia al hospital.

Acaip-UGT señala que una de las formas de introducir drogas en las prisiones es a través de las comunicaciones de los internos con sus familiares, amigos y allegados. "Los fines de semana hay un incremento del número de comunicaciones y visitas, que la prisión de Algeciras presenta un déficit de un 15% de funcionarios y una masificación del 135% de internos. Debido a ello, la seguridad interior de la prisión queda menoscabada", lamenta el sindicato.

Estas circunstancias están siendo denunciadas de forma continuada por Acaip-UGT desde hace años a todos los estamentos de la Administración Penitenciaria y del Ministerio del Interior, "los cuales hasta la fecha de hoy no han adoptado las medidas oportunas para paliar tan gravísima situación, optando por el silencio y el más absoluto de los desprecios hacia el colectivo de los trabajadores penitenciarios".

El sindicato informa de que va a instar a la Dirección del centro penitenciario a que remita al juzgado de guardia todas las diligencias practicadas dentro de la prisión al entender que se podría haber cometido un delito contra la salud pública con agravante. "Queremos felicitar a todos los trabajadores intervinientes, que vuelven a dejar constancia de su entrega y profesionalidad, pues responden a las agresiones de los internos y también al menosprecio de nuestra propia Administración penitenciaria, velando por la vida e integridad física de los presos".