Alberto Grimaldi

Director de Europa Sur

En las últimas y gozosas semanas de su vida animé varias veces a José Luis a que recuperara siempre que quisiera y pudiera su contacto con los lectores de este diario. "Nosotros te echamos de menos, seguro que ellos también", le decía. Respondió con un sí. Barruntaba un artículo hace días. El sábado me lo envió; quería que lo revisase: estaba impoluto. El destino quiso que mientras su cuerpo se nos iba su columna de los martes se distribuyera entre sus lectores. Así que José Luis hasta en el último día de su existencia mortal fue fiel a su cita. A su cita con usted, el lector. Y lo hizo con un texto que le dibuja y nos define: somos seres tan duros como el acero y tan frágiles como el cristal. Siempre nos quedará su ejemplo, el profesional y el personal, porque este maestro de periodistas se ha ido dándonos la enésima lección de dignidad.