Miles de personas le dijeron anoche “hasta el año que viene” a la Feria Real de Algeciras en un sábado muy caluroso en el que las casetas y la zona de las atracciones recibieron, más que ningún otro día, a los vecinos de las otras poblaciones del Campo de Gibraltar. 

Tras un día de despedida muy intenso en el que los algecireños quisieron aprovechar al máximo las últimas horas de su gran fiesta, los acontecimientos se precipitaron después del tradicional espectáculo de fuegos artificiales: los últimos brindis, los abrazos, el “que el año que viene nos veamos todos aquí” y la sensación de haber vivido una gran Feria.

Sobre todo tranquila, sin apenas incidentes más allá de alguna pelea (ayer se produjo una en el botellón de la zona del Magallanes que obligó a intervenir a la Policía) y poco más. 

En el último día de la Feria 2019, el Partido Popular celebró un acto de convivencia con más de 250 interventores y apoderados en el que participó el presidente provincial del PP de Cádiz Antonio Sanz. 

En la caseta de la Sociedad Federada de Pesca Deportiva El mero se celebró el acto de entrega de trofeos correspondientes a las competiciones que la entidad ha desarrollado durante el primer semestre del año en las modalidades de mar-costa y de embarcación fondeada. En la cita estuvo presente la teniente de alcalde delegada de Pesca del Ayuntamiento de Algeciras, Laura Ruiz, junto al presidente del colectivo, José Cortés Fernández y su junta directiva, además del tercer teniente de alcalde, Sergio Pelayo, y representantes de la oposición municipal.

Después de la despedida, hoy llega la hora de hacer balance y comenzar el desmontaje de las casetas y los cacharritos en un domingo de resaca en el que muchas miradas se dirigen hacia Socuéllamos, una población de La Mancha en la que el Algeciras puede celebrar el ascenso a Segunda B. Quizás haya entonces quien pida que se vuelva a abrir la Feria. No fuera malo.