El cineasta algecireño Ángel Gómez Hernández comenzó ayer el rodaje de un nuevo cortometraje, Sed de luz, que se presenta como un punto de inflexión en la carrera del joven director. Se trata de un ambicioso proyecto, que en origen iba a ser protagonizado por el mítico Paul Naschy, fallecido el pasado noviembre. Gómez confía en tener terminado el filme más o menos a finales de abril y, a partir de entonces, moverlo por distintos certámenes.

Sed de luz está coescrito por el propio realizador y su padre, Ángel Gómez. El protagonista, llamado Vladimir, advierte al llegar a su hogar que alguien se ha colado en el piso y descubre a su esposa fallecida. Destrozado por lo ocurrido, sube a la azotea en busca de su suicidio. La propuesta es un thriller, en el que se mezclan el terror, el suspense y el drama, una combinación de géneros predilecta del realizador. "Es una historia actual con tintes clásicos", considera Gómez, para el que el personaje principal posee una gran capacidad de encanto. Como también es habitual en las obras del cineasta, se reserva un giro argumental con el que promete sorprender al espectador.

El papel protagonista, tras la desgraciada desaparición de Paul Naschy -que se involucró muy mucho en el proyecto y a cuya memoria estará dedicada la obra-, recae en el holandés Peter Van Randen, intérprete y especialista, cuyas características físicas se adaptan como un guante al personaje. En el reparto también figuran los actores malagueños Mariví Carrillo y José Manuel Hidalgo.

Producciones Diodati, en la que participa Gómez, con la producción asociada de AV2 Media apoyan el proyecto, que reúne a un equipo formado por 50 personas. El trabajo de preproducción comenzó en mayo del año pasado y se ha diseñado un corto de envergadura. Ayer y hoy la filmación se produjo y será en Málaga, en un plato de croma con el decorado de la azotea en la que transcurre el 80 por ciento de la historia. La postproducción requerirá un arduo trabajo de recreación digital. Mañana el rodaje se desplazará a Algeciras para grabar interiores.

"Se trata de un punto radical de inflexión en mi carrera por todo, por medios, por ambición del proyecto, por sus dificultades, por mi experiencia. Considero que será una referencia en mi trayectoria, la más importante desde Lágrimas de papel", entiende el algecireño, muy ilusionado con la nueva aventura.