A la hora esperada, las diez y media de la noche, un aplauso casi levantó el albero de la plaza de toros de Algeciras; Miguel Poveda apareció en el escenario con su característico atuendo, traje negro, camisa blanca y un vozarrón que aún estaba por descubrir por los algecireños.

Se abrió paso el cantaor en medio de la noche con una liviana a capela que dejó embelesado al público que se encontraba frente a él. Y es que, el artista cantaba al mismo tiempo que interpretaba cada tema como si en ello le fuera la vida, poniéndole garra y sentimiento a cada palabra y a cada movimiento.

Más de 2.500 personas tomaron la plaza de toros, en la parte frontal de las gradas y en las sillas del albero, haciendo parecer que el concierto se trataba de una actuación íntima, donde el artista se entregó por completo.

A partir de la segunda pieza que interpretó el cantaor, unas palmas, dos guitarras y un cajón fueron suficientes para adornar su emotiva voz, que dejaba al público en silencio.

Seriedad y profesionalidad se respiraba en aquel entorno, en el que la magnífica acústica y el juego de luces tenues hicieron resplandecer al artista en el centro del escenario.

Poveda interpretó con su personal estilo canciones de flamenco popular que dejaron al público ensimismado debido a su voz penetrante.

La puesta en escena fue sencilla, pocos elementos distrayentes, simplemente el cantante con su acompañamiento musical y tejidos de seda de colores cálidos que enmarcaban el escenario.

El artista cambió de género constantemente y parecía que iba a arrancarse a bailar en cualquier momento ante un público muy diverso. Personas de todas las edades decidieron ayer acudir al espectáculo de Poveda.

El cantaor agradeció al público poder compartir la noche con ellos y recordó al "gran maestro" Paco de Lucía. Además, dedicó a los allí presentes unas personales alegrías de Cádiz.

Miguel Poveda terminó la gira promocionando su octavo y último disco, Coplas del querer en diciembre del año pasado. En este tour la primera actuación que hizo en la comarca fue en San Roque, donde dejó al público cautivado. Más tarde también estuvo en la Línea, y la de anoche fue la tercera actuación que realiza en el Campo de Gibraltar.

Aún fuera de su promoción, el cantante sigue deleitando al público con recitales flamencos como el de ayer. También es protagonista del espectáculo Historias de viva voz, en el que Poveda hace un recorrido por la historia del cante flamenco de los últimos cien años. Además, continúa realizando homenajes que brinda a los artistas que le han inspirado durante toda su vida. El cantante, además, realiza conciertos benéficos y colaboraciones con diferentes artistas como Joan Manuel Serrat, Pastora Soler o Zenet.

Miguel Poveda tiene pensado sacar un nuevo disco en diciembre de este año tras tomarse un respiro después de su último disco, publicado en 2010.