El modesto Anguiano, equipo de la Tercera riojana, será el primer escollo que tendrá que superar la Real Balompédica para conseguir el ansiado ascenso a Segunda B.

Si los albinegros hacen buenos los pronósticos, se verán las caras en el último enfrentamiento al vencedor del duelo entre el Mirandés y el Santanyí, en el que los burgaleses son favoritos tras finalizar primeros de su grupo, el castellano-leónes, y haber cedido sólo una derrota en toda la temporada regular.

En La Línea están contentos con el emparejamiento, ya que ha cambiado la suerte de temporadas anteriores, en las que equipos con más entidad que el conjunto riojano, como el Díter Zafra, y en mayor medida el Mérida y el Granada, se impusieron a los linenses en la primera eliminatoria con mayor o menor polémica. Además la Balona ha eludido en la primera ronda a varios cocos, como el Sant Andreu, que está presidido por el ex presidente del Barcelona, Joan Gaspart, y en la hipotética última eliminatoria a conjuntos que se han salido en sus grupos, como el Barcelona B, la Gimnástica Torrelavega -que llegó a los 100 puntos- , el Real Oviedo o el Ciudad de Santiago -antiguo CD Compostela, y que tienen como premisa el ascenso a Segunda B de forma casi obligatoria.

Uno de los inconvenientes será el largo desplazamiento que tendrán que hacer los balonos en esta primera eliminatoria. Tendrán que recorrer casi mil kilómetros de ida y otros tantos de vuelta. Además, si consiguen pasar a la última ronda el viaje a Miranda de Ebro o Mallorca tampoco es moco de pavo.

El encuentro de ida se disputará el próximo domingo en el Municipal de La Línea a partir de las 19:00 horas. La entrada más cara será de 15 euros para el público general en tribuna, 12 para los abonados, 10 para señoras y jubilados y 7 para los socios que estén al día en sus cuotas. En preferencia la entrada más cara cuesta 10 euros.

La afición ya espera impaciente y con ilusión la llegada del encuentro ante un rival del que se sabe bien poco.

La anécdota del sorteo la protagonizan el Toledo y el Sangonera, que coincidieron en el mismo grupo la temporada pasada. El Algeciras privó a los segundos de medirse al Toledo en la final.

El primer rival de la Balona para retornar a Segunda B, el Club Deportivo Anguiano, ha sido uno de los equipos más regulares del grupo XVI de Tercera división, el riojano, y llegó a la última jornada de Liga con opciones de terminar primero, pero el Alfaro no falló en su visita al Rapid.

El conjunto de la comarca de la Rioja Alta hace valer su fortaleza en casa, donde saca provecho de las reducidas dimensiones del terreno de juego, en el que el equipo recibe el apoyo de su animosa afición. El pueblo tiene 535 habitantes, según el estudio del Instituto Nacional de Estadística de 2007, de los que 300 acuden cada domingo a la Isla.

El Anguiano ha sido, junto al Calahorra, el equipo menos goleado del grupo y cuenta con el tercer máximo artillero, Joseba, que ha anotado 26 goles y tiene experiencia en superior categoría.

Precisamente esa es una de las armas del Anguiano, la experiencia en Segunda B y en liguillas de muchos de sus jugadores, aunque hay un dato a tener muy en cuenta. Hasta hace dos temporadas los primeros del grupo riojano y del navarro se cruzaban entre sí antes de que se disputase la liguilla de ascenso, por lo que el filtro era mayor entre equipos representativos de localidades con muy pocos habitantes.

Un nutrido grupo de jugadores militó la temporada pasada en el Fundación Logroñés, que se midió al Lucena en la primera eliminatoria por el ascenso a Segunda B. En Lucena el conjunto riojano empató a uno, y en el estadio Mundial 82 los cordobeses ganaron por 0-2. Entre esos jugadores están los metas Javi y Josean, Blas, Herrero, Carmelo, Chirri, Javi Adán, Richi y el veterano David Ruiz, que tiene experiencia en Segunda con el Logroñés, el Numancia o el Eibar.

El Club Deportivo Anguiano fue fundado en 1999 en un intento de resurgir el fútbol en la localidad y lleva cuatro temporadas en Tercera. La campaña pasada también disputó la liguilla de ascenso, pero fue apeado en la primera eliminatoria por el Deportivo B.

La plantilla que dirige el técnico Rafa García sólo se desplaza a la localidad de Anguiano para disputar sus partidos. Los jugadores residen y entrenan en Logroño, la capital de La Rioja, y hacen el recorrido de cerca de 100 kilómetros de ida y vuelta cada quince días.

Aún así, los 60.000 euros de presupuesto del conjunto riojano están a años luz de los equipos del grupo décimo.

Eduardo Vílchez, ex entrenador de la Unión Deportiva Los Barrios, es un gran conocedor del grupo XVI de Tercera, en el que milita el Anguiano. No obstante, el técnico ha militado en el Logroñés y en el San Marcial, otro conjunto riojano. El ex entrenador gualdiverde afirma que la Balona no debería pasar apuros ante el Anguiano. "La lógica dice que la Balona debería pasar. En el grupo décimo la mayoría de equipos que no han descendido pondrían en apuros al Anguiano. Por ejemplo el Ayamonte, un equipo de la zona media que he visto esta temporada".

Sin embargo, Vílchez advierte de que el rival de la Balompédica tiene un bloque de jugadores con experiencia. "En ese equipo el que más y el que menos tiene experiencia en Segunda B y en fases de ascenso. La temporada pasada muchos de esos jugadores jugaron en el Fundación Logroñés, que se midió al Lucena en la liguilla", explica. "El Anguiano tiene un campo pequeño y ahí puede ser difícil jugar", continúa.

Para el ex entrenador de la Unión, que ahora trabaja en la zona de Cataluña, la clave es que la Balona deje sentenciada la eliminatoria en el partido de ida el próximo domingo en el Municipal. "Si no se le da mal el primer encuentro, algo que veo poco probable, tendrán muchas opciones de pasar a la siguiente eliminatoria, en la que ya tendría presumiblemente al Mirandés, un equipo mucho más potente que el Anguiano", destacó el preparador ex de la Unión.