El equipo de gobierno y los representantes de la plantilla municipal escenificaron ayer el cierre de las negociaciones sobre el nuevo convenio colectivo. El alcalde y los representantes sindicales rubricaron el pacto laboral alcanzado, con la firma del documento en el salón de plenos del Ayuntamiento.

El texto cita a las partes dentro de dos años, a principios de 2014, tras la expiración del nuevo acuerdo, que permanecerá vigente hasta el 31 de diciembre de 2013. Según explicó el presidente de la Junta de Personal, Miguel Ángel Lara, durante todo este tiempo permanecerán congelados los salarios de los trabajadores públicos.

Además de esta medida, el convenio también endurece los criterios previstos para acogerse a permisos u otros beneficios. A este respecto, el alcalde de la ciudad, José Ignacio Landaluce, explicó que este pacto le supondrá a las arcas municipales un ahorro de 580.000 euros durante los dos próximos ejercicios. De hecho, a preguntas de los periodistas, el primer edil especificó que esta reducción del gasto se deriva principalmente de pequeñas partidas contempladas anteriormente: por ejemplo, de algún tipo de prejubilaciones previstas en el documento precedente. "Aunque, en ningún momento esto supondrá un menoscabo en las condiciones de trabajo del personal público", quiso recalcar el regidor algecireño.

Las dos partes hicieron hincapié en la predisposición demostrada por el contrario a la hora de sentarse a negociar. Landaluce subrayó que este acuerdo laboral dota al Consistorio de un marco de "normalidad". "Lo que en otros momentos no sería digno de mención, pues hoy sí tiene mucho valor. Es bueno que no haya habido ninguna manifestación o concentración en el Ayuntamiento", destacó el alcalde.

Paralelamente, Lara volvió a insistir en que este convenio debe valorarse como el "mejor" en los actuales tiempos de crisis. El presidente de la Junta de Personal apuntó que los sindicatos siempre negociaron desde la "responsabilidad" para llegar a un acuerdo con la administración local. El representante de los empleados afirmó que este pacto cubre las expectativas económicas del Ayuntamiento y las tres exigencias de la plantilla: la no eliminación de puestos de trabajo, el pago puntual de las nóminas y la permanencia de un porcentaje importante de los derechos adquiridos en los últimos años.