LA Diputación de Cádiz ha anunciado recientemente que construirá una nueva Residencia de Ancianos en La Línea. La comarca está muy mal dotada de este tipo de servicios.

La Residencia de Ancianos El Palmeral, en La Línea, es la más codiciada y alabada por todos, pero allí sólo te admiten si estás en la lista confeccionada por la Junta de Andalucía. En esta residencia no existe ninguna plaza privada, es decir, que ni pagando puedes obtenerla porque es totalmente pública y todas las camas están concertadas con la Junta. María Luisa Escribano es su responsable y ha conseguido un oasis en medio de tanto dolor.

La lista de espera de las residencias públicas son muy largas, la ley de la dependencia aún está en ciernes y los gestores de los servicios sociales hacen milagros con los recursos que tienen. Aunque los responsables de estos servicios deben estar enormemente agradecidos a muchas familias que asumen, con mucho esfuerzo, lo que la Junta de Andalucía no es capaz de ofrecer y tienen la decencia de no denunciarles por la arbitrariedad y la nula transparencia en la asignación de las plazas. Si la familia del anciano está en Algeciras y le dan plaza en Jerez, estupendo. La soledad que eso genera al anciano, su deteriorada situación física, y el alejamiento al que es sometido de su entorno natural no importan. Claro que desde que ingresa en Jerez puede pedir traslado a una plaza en Algeciras y esperar sine die. Cuanta bondad. Cuanta empatía. Estos responsables creen que nunca van a llegar a viejos.