EL tema de los Reyes Magos es uno de los que más ha servido de inspiración a los niños a la hora de darle vueltas a los asuntos que llenan los primeros días del año. Pasarse el día entero jugando con los regalos de los tres reyes de Oriente es una manera de poner punto final a la magia que aún se puede observar en las fiestas navideñas. Lo cierto es que ahora habrá que tener una especial habilidad para hacer frente a los gastos extraordinarios realizados con motivo de las Navidades. La verdad es que hoy hay que ser un mago de las finanzas en cualquier periodo del año para llegar a fin de mes.

Y hablar de economía, de la que se ignora casi todo, es peor que peor, ganas de complicarse la vida, porque es difícil proponer remedios que permitan satisfacer a todos. Por eso explicar la cuesta de enero o el déficit económico personal de cada cual no es una tarea fácil. Desde luego, ante la incertidumbre electoral, hay que recordar que los poderes públicos deben atender al objetivo constitucional de buscar una cierta equiparación del nivel de vida de todos los españoles, sin que las diferencias entre los Estatutos reformados de las distintas Comunidades Autónomas impliquen, en ningún caso, privilegios inconstitucionales económicos o sociales. Hoy por hoy, los datos que nos ofrece la realidad indican que el aumento de los precios de los productos básicos, la elevación de los tipos de interés y la desaceleración del crecimiento económico no dejan de crear malestar en las personas que ya se sienten instaladas en la crisis.