SÉ que soy pesado con el tema del ferrocarril, pero es que clama al cielo. La ministra de Fomento, Ana Pastor, anunció ayer que la obra para construir un tercer carril ferroviario entre la Comunidad Valenciana y la frontera con Francia, con 469 kilómetros, estará terminada en 2016 tras una inversión de 1.400 millones de euros. Un tercer carril quiere decir, obviamente, que ya hay dos operativos. Y nosotros, los campogibraltareños, seguimos aquí esperando desde 2011, cuando gobernaba el PSOE, que el departamento estatal conceda luz verde y adjudique la reforma de un tramito de vías decimonónico entre Algeciras y la barriada castellarense de Almoraima con 55,2 millones en tres años sin que con eso concluya la Algeciras-Almoraima, para la que hacen falta 1.300 millones. En resumen, Valencia goza ya de dos carriles frente a uno, y malo, en la comarca y dos ritmos de trabajo. Nos queda mucho chacachá del tren, por lo que se ve.