LA delegada provincial de Educación, Blanca Alcántara, se cubrió ayer de gloria a la hora de presentar los datos del inicio del curso escolar en la comarca. Parecía que la consigna política pasaba únicamente por criticar los recortes del Partido Popular en otras comunidades en lugar de hablar de los programas para formar mejor al alumnado andaluz. De hecho, se escudó en "no aburrir" para no ofrecer muchos datos. Tanto énfasis en vender el modelo de la Andalucía imparable le llevó a no reparar en que el desglose de los números que se repartieron al final de la rueda de prensa no cuadraban ni a tiros. Un error informático y las prisas -aclararon luego- llevó a los técnicos a confundir en varios registros el número de alumnos por el de aulas. Un error de bulto que nadie supervisó, que nadie corrigió y que impidió poder profundizar en la información. Pero lo importante era "no aburrir" pese a que la monserga de que el PSOE es bueno y el PP malo duerma hasta las piedras.