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Algeciras, así sí

  • El equipo de Asián recupera su cara más competitiva en el nuevo año

  • Es el que mejor ha comenzado de los cuatro que acabaron 2017 en puestos de liguilla

  • La puerta sigue a cero

Ito pelea un balón con un jugador del Sanluqueño, el pasado domingo.

Ito pelea un balón con un jugador del Sanluqueño, el pasado domingo. / sentimiento verdiblanco / paco bernal

Dos partidos, saldados con una gran victoria y un meritorio empate, han bastado para cambiar la cara del Algeciras CF en el nuevo año. El equipo de José Antonio Asián parece haber revertido por fin su mala dinámica de final de 2017 y vuelve a jugar con una determinación que recuerda a ese conjunto albirrojo impenetrable de comienzos de la temporada.

La férrea imagen ofrecida el pasado domingo en El Palmar de Sanlúcar de Barrameda, donde el Algeciras empató a cero, corrobora las buenas sensaciones de la semana anterior. Así sí. Así los de Asián están capacitados para competir con cualquiera y donde sea.

La visita al Sanluqueño tenía mucho de prueba del algodón. El Algeciras pudo caer y pudo ganar en El Palmar, pero su impronta fue la de un bloque del primer al último minuto. No hubo un solo atisbo de descomposición como ocurrió en Arcos o en Lucena, por citar las dos grandes debacles del curso. Al contrario, el equipo se asemejó al de los viajes más solventes.

De los cuatro conjuntos que acabaron 2017 en los puestos de liguilla, el Algeciras es el que mejor ha arrancado el nuevo año con cuatro puntos de seis posibles. El líder se desquitó de su tropiezo en Ceuta con un triunfo sobre un Atlético Onubense venido a menos, el Sevilla C sufrió un batacazo en Los Barrios y la Lebrijana mordió el polvo en Puente Genil y cedió el cuarto puesto a un relanzado Ceuta (seis de seis).

Los albirrojos han echado el cerrojo a la portería de Romero y ya encadenan dos jornadas sin encajar. El Gato, por cierto, volvió a sacar su ángel de la guarda en Sanlúcar cuando más falta hacía. La defensa ha recuperado la normalidad con Máiquez y Pablo en los laterales y Berlanga y Siles como pareja de centrales. La reubicación de Mané en el centro del campo tras la marcha de Ganet es una de las maniobras de Asián que ha sentado de maravilla al colectivo.

Esto no para y el Algeciras ya fija su mirada en el Cabecense, el rival que visitará el Nuevo Mirador el domingo a las 12:00, un horario que permitirá ver si la afición responde mejor que en las gélidas tardes de invierno.

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