El defensa algecirista Pablo de Castro sufre una rotura del tabique nasal y deberá pasar por el traumatólogo para conocer el alcance exacto de la lesión. El lateral se lastimó en los primeros compases del partido en Sanlúcar y, sin embargo, jugó más de 80 minutos con la fractura nasal en un gesto que el club albirrojo agradeció ayer públicamente.

Salpicado por las lesiones desde su regreso al Nuevo Mirador, Pablo de Castro demostró el pasado domingo en El Palmar que quiere dejar atrás esa estela de jugador 'gafado'. El lateral zurdo se partió literalmente la cara en un lance del juego a los cinco minutos y, cuando lo normal hubiese sido pedir el cambio, insistió en continuar sobre el césped, dolido pero a pleno rendimiento.

Pablo ha encajado a la perfección en los esquemas de José Antonio Asián y ha demostrado tener condiciones sobradas para militar en el Algeciras. Las pequeñas lesiones que ha ido acumulando son el único lastre para que el algecireño termine por consolidarse.

El futbolista, que pasó por la cantera del Real Club Espanyol, conocerá esta semana el alcance de la rotura y si puede jugar el domingo ante el Cabecense con protección o debe causar baja.