El Instituto de Estudios Campogibraltareños (IECG), uno de los agentes culturales de referencia en la comarca, sobrevive en una situación de marcada complejidad. El organismo carece de los recursos humanos y económicos adecuados para su normal funcionamiento. El esfuerzo humano y la imaginación de equipo directivo y académicos ha paliado durante el periodo de crisis los hándicaps que se están presentando.

Al margen de la afectación a la línea editorial que se ha comprobado, de forma acentuada en los dos últimos años, este diario ha podido saber que se están produciendo incluso apuros para poder publicar en formato digital la revista Almoraima, una de las señas de identidad de la institución. Los números 36 y 38 son por ahora los últimos que han salido en papel, el pasado abril.

Durante el verano se ha tenido que suspender la emisión del boletín informativo del IECG. Es una de las herramientas que utiliza el organismo dependiente de la Mancomunidad de Municipios para cumplir uno de los objetivos que más tiene asumido en la actualidad, el de dar difusión y promocionar las actividades relacionadas con la entidad y sus miembros.

El boletín se ha reactivado ahora y en la entrega de reaparición se pone el dedo en la llaga de las vicisitudes. "La crisis económica actual sirve de excusa para justificar cualquier desafuero. Este medio de difusión de la vida académica del IECG, que se hace eco también de aspectos destacables de la vida cultural del Campo de Gibraltar, lleva meses en silencio, víctima de la desidia administrativa o de su incapacidad para afrontar vientos contrarios", afirma.

"La reacción de los seguidores de este boletín, reclamando su reactivación ante la extrañeza del prolongado silencio, nos obliga a mantenerlo vivo como canal de difusión desde la aportación generosa de unos pocos voluntarios", explica el IECG las circunstancias de la vuelta de estas circulares informativas digitales.

"Así será -concluye- hasta que las aguas retornen a su cauce y el funcionamiento administrativo de nuestro organismo autónomo, dependiente de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar, recupere la normalidad de tiempos pasados, cuando existían bonanza económica y una decidida apuesta por la cultura. Esperemos que sea pronto".