Maritimas

La flota que faena en Mauritania logra "discretas" mejoras operativas

  • El colectivo lamenta que la comisión mixta con la UE no debatiera ampliar la zona de pesca

Las flotas españolas que faenan en las costas mauritanas (buques arrastreros congeladores onubenses y canarios, y de palangre y arrastre gallegos) califican de "discretos" los avances conseguidos en la última comisión mixta para mejorar la ejecución del acuerdo pesquero de la Unión Europea con este país africano.

El sector apuntó que se han producido avances en aspectos operativos que mejorarán las condiciones a la hora de faenar, según la flota española. Se ha reducido de 36 a 24 horas el plazo de comunicación de salida de aguas mauritanas y se han definido mecanismos ágiles de notificación ante una urgencia, como una avería. También se ha acordado la creación de una ventanilla única para gestión de documentación y la adopción de un sistema electrónico de diario de a bordo para la notificación de capturas.

El director gerente de Asociación Nacional de Armadores de Buques Congeladores de Pesca de Marisco (Anamar), José Suero, apuntó que se ha conseguido que el control de capturas accidentales de cangrejo (10%) se realice al final de cada marea y no en el momento de la inspección, como ocurre ahora.

Suero lamentó que no se haya debatido la ampliación del área de pesca en la zona norte, ni el sistema científico para programar los paros biológicos de la modalidad marisquera.

El representante de la Asociación Nacional de Cefalopoderos (Anacef), Juan Martín, considera que hay temas importantes sobre los que no se han tomado decisiones, como la modificación de las zonas de pesca para poder capturar calamar y choco, así como el incremento de las posibilidades de pesca de merluza y jurel.

Para las flotas de palangre y arrastre gallegas quedó sobre la mesa la solicitud de levantar la prohibición de 2013 de producir aceite de pescado natural a partir de los hígados, la revisión de las tasas con que se gravan los productos pesqueros así como la obtención de permiso para poder filetear un porcentaje de las capturas para dar valor a productos como la palometa negra y la merluza negra. También se descartó una licencia única para el palangre.

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