José Manuel García-Margallo, ministro español de Asuntos Exteriores y de Cooperación en funciones, ha remitido una carta al secretario del Foreign Office, Boris Johnson, en la que le insta a mantener una reunión que permita "acordar conjuntamente la mejor solución" frente al nuevo escenario que se dibuja en el conflicto de la Verja ante la futura retirada de Reino Unido y de Gibraltar de la Unión Europea.

José Manuel García-Margallo emprende así la acción diplomática de una idea, la de la cosoberanía de la Roca, que expresó hace cuatro meses en los medios de comunicación y que, según puede leerse en la misiva enviada a Boris Johnson, entiende que es lo más positivo "para la población de Gibraltar y del Campo de Gibraltar" porque "ha de permitir la continuación de la aplicación de los Tratados de la Unión Europea en el Peñón".

El ministro español invita al británico a "retomar las negociaciones" que en su día mantuvieron Reino Unido y España a partir de la Declaración de Bruselas de 1984, "acordada en el marco del inminente ingreso de mi país en las entonces Comunidad Europeas", escribe García-Margallo, quien estima que es "urgente empezar a trabajar en este asunto". "Hasta que no alcancemos este acuerdo bilateral previo no va a ser posible definir la nueva relación de Gibraltar con la UE", advierte el ministro, que recuerda a Boris Johnson que en julio, en Bruselas ya le expresó su enorme interés por "abordar la cuestión de Gibraltar" que, le explica, "es especialmente sensible" para España.

García-Margallo ha remitido también al resto de ministros de la Unión Europea un aide-memorie -una propuesta de acuerdo o texto de negociación para su debate- en el que resume los aspectos históricos y jurídicos más destacados de la controversia entre España y el Reino Unido, así como los relativos a las negociaciones bilaterales habidas en el pasado, singularmente con motivo del ingreso de España en las entonces Comunidades Europeas. En una carta adjunta a este texto, el ministro español pide a sus homólogos europeos "apoyo y comprensión" para que la cuestión de la Verja "quede excluida de las negociaciones para establecer un nuevo marco de relaciones entre la Unión Europea y el Reino Unido y en consecuencia deba resolverse mediante negociaciones bilaterales previas entre España y el Reino Unido", algo que considera "fundamental".

"España lleva años insistiendo en la necesidad de reanudar estas negociaciones, con el fin de alcanzar una solución mutuamente aceptable. Esta negociación resulta tanto más urgente en el contexto de la decisión británica de abandonar la Unión Europea", manifiesta el ministro en el escrito, en el que advierte que ha informado por carta al secretario del Foreing Office.

"Estoy convencido de que España y el Reino Unido seremos capaces de encontrar una fórmula aceptable para ambos y en interés de los habitantes de Gibraltar, de manera que éstos puedan seguir beneficiándose de las ventajas derivadas de la aplicación a Gibraltar de los Tratados de la Unión Europea", argumenta. "Con esto se evitará, además, que el contencioso entre Gran Bretaña y España afecte negativamente, como lo está haciendo ahora, a determinados aspectos como, por ejemplo, el bloqueo de normativa europea en el ámbito medioambiental, pesca o aviación civil", concluye.