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Los 21 nigerianos que permanecían en dependencias del puerto granadino de Motril tras ser rescatados después del naufragio de su patera han sido trasladados hoy al Centro de Internamiento de Extranjeros de La Piñera (CIE). Supone el paso previo a su expulsión.

Del resto de viajeros, 14 han desaparecido en la mar y se ha perdido la esperanza de encontrarlos con vida o incluso de localizar sus cuerpos, por lo que ya se ha suspendido definitivamente el dispositivo de búsqueda de Salvamento Marítimo.

Otros dos supervivientes se quedarán en España por motivos humanitarios, ya que se trata de un hombre que ha sido acogido por la Cruz Roja de Granada tras perder en el naufragio a su hijo de 3 años, a su mujer y a un hermano, y de una mujer embarazada que ayer fue llevada a un centro asistencial de Puente Genil, en Córdoba.

La expulsión del resto de los supervivientes depende de una resolución judicial, para la que existe un plazo de 40 días.

La consejera andaluza de Gobernación, Clara Aguilera, mantuvo ayer que "se ha hecho todo lo posible» en la búsqueda de los 14 inmigrantes desaparecidos en el Mar de Alborán y advirtió de que, con la llegada del buen tiempo, es posible que haya que lamentar algún caso más.

"Creo que se ha hecho, en la medida de lo posible, todo lo que se podía hacer", aseguró Aguilera tras participar en la primera Conferencia Sectorial de Inmigración. Defendió la colaboración entre el Gobierno central y la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Motril en la búsqueda de los inmigrantes, que ya se ha dado por finalizada al perder toda esperanza de encontrarlos con vida.

La consejera apostó por trabajar para que estas situaciones "realmente dramáticas y lamentables" no vuelvan a suceder y señaló como gesto la concesión de la nacionalidad españolas a uno de los 23 supervivientes, un hombre de origen nigeriano que perdió en el naufragio a su mujer, a su hijo y a su hermano. Aguilera se preguntó que "qué menos se puede hacer por una persona que ha perdido tanto" y defendió la actitud generosa que debe estar presente en estos casos aunque, tal y como argumentó, la medida no es más que una "situación paliativa puntual" por lo que, lo fundamental es "trabajar para evitar el drama".

El alcalde de Motril, Carlos Rojas, publicó un bando por el que decretaba un día de luto oficial en el municipio y el ondeo de las banderas a media asta por la desaparición de los inmigrantes.