El Instituto Nacional de Estadística ha publicado recientemente una nueva bajada del precio de la vivienda, con una caída del 7,6% en el primer trimestre del año con respecto a 2008, constantándose que el sector de la construcción continúa cotizándose a la baja en toda España. Sin embargo, Algeciras no se beneficia de la caída del ladrillo a la hora de pagar impuestos. Es lo que ocurre con el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), cuya subida en Algeciras es ya conocida como catastrazo.

A pesar de la bajada del tipo de gravamen municipal de un 1,1 al 0,89% y el compromiso del Consistorio de mantener el crecimiento de este impuesto en un 7% como máximo respecto al recibo anterior -durante este año y los dos próximos-, la medida no evita que el precio haya subido espectacularmente.

La razón para este incremento, a pesar de las rebajas municipales radica en que este impuesto se calcula a través del valor catastral de los inmuebles. Este valor, que se basa en la mitad del precio de mercado -mediante una tasación individual de cada piso o casa-, se actualizó en Algeciras cuando el mercado inmobilario se encontraba en la cúspide. De nada sirve ahora que los pisos valgan menos que en 2007, el cálculo será la base para los recibos de varios años.

Además, la incertidumbre para los detractores de esta medida se encuentra en el año 2012. A partir de esa fecha, y tras las elecciones municipales de 2011, el cálculo para confeccionar los recibos no se beneficiará de ninguna de las medidas correctoras aplicadas para amortiguar el impacto en los tres primeros años. Es decir, el catastrazo alcanzará todo su esplendor en 2012.

La Federación de asociaciones de Participación Ciudadana del Sur Azul (Fapacsa) sigue solicitando la anulación de la base catastral, una petición que se mantiene desde 2007. "Queremos que se realice una revisión nueva con el precio de mercado actual, no nos sirve de nada la bajada del gravamen porque el error de base está en la valoración catastral", añadió el presidente Juan de Dios Regordán. "No nos conformamos con esa generosidad que supone bajar del 1,1al 0,89%, porque el pleno puede cambiarlo en cualquier momento", apostilló. Además, informó que los impuestos están llegando a los ciudadanos con el gravamen al 1,1%, por lo que se están rechazando.

Regordán recordó que el saneamiento de las arcas municipales pasa por la subida de los impuestos. Una vez que ha caído el boom inmobiliario, los mayores recursos del Ayuntamiento se consiguen a través del IBI. "Han adelantado la revisión cuando la vivienda estaba a la alza con fines claramente recaudatorios", añadió. Además, señaló que el equipo de gobierno lo ha reconocido abiertamente. "El problema ha estado en que no ha habido un movimiento asociativo fuerte en Algeciras que se hubiera dado cuenta antes", aclaró.

Fapacsa entiende que un Ayuntamiento no puede basar sus presupuestos en ingresos previsibles, como sucede con los gastos, de lo contrario el déficit va en aumento. Asimismo, la federación vecinal opina que se debe llegar a un acuerdo local en el que intervenga la Junta de Andalucía, aportando mayores ingresos a las administraciones locales y evitando que se se produzcan estas subidas en los recibos de los ciudadanos.

El presidente de Fapacsa manifestó que la asociación está abierta al diálogo con el equipo de gobierno para llegar a un acuerdo legal para que la ponencia se anule. "En las dos manifestaciones convocadas el equipo de gobierno se ha dado cuenta que los ciudadanos no están por la labor de pagar más impuestos", explicó. Regordán lanzó un mensaje de tranquilidad a sus asociados, asegurando que la junta directiva no firmará nada que antes no haya pasado por la asamblea de vecinos, que son los que han luchado durante todo este tiempo.