La carrera política de Antonio Saldaña (Sevilla, 1976) es fulgurante. En sólo cuatro años, este ingeniero de Caminos afincado desde hace tiempo en Jerez ha pasado de ser un desconocido en la política provincial a convertirse en la mano derecha de la alcaldesa de Jerez, en diputado provincial y en secretario provincial del PP, partido con el que concurre a estos comicios como número 2 por Cádiz.

-Después del 22-M, y salvo sorpresa descomunal, usted será el único jerezano en el Parlamento de Andalucía. ¿Supone eso una responsabilidad añadida?

-A nivel personal sí que lo es. Pero sobre todo este hecho lo que viene a constatar es la diferencia entre un partido, el PP, que sabe centrar sus prioridades, y otros como el PSOE que vuelve a demostrar una vez más su desprecio hacia Jerez y el abandono de la Junta hacia la primera ciudad de la provincia en población. Eso no es nuevo y viene desde los tiempos de Pacheco, que se pasó muchos años denunciando las zancadillas de la Junta y del PSOE a Jerez, y es también lo que venimos sufriendo estos cuatro años desde el gobierno que preside María José García-Pelayo. Evidentemente, si alguien quiere que la voz de Jerez esté representada en el Parlamento andaluz, sólo puede votar al PP.

-Sea sincero: ¿Tiene alguna posibilidad el PP de mantener los siete escaños que logró por Cádiz en las andaluzas de 2012?

-Eso es muy difícil de concretar porque el margen de error de las encuestas, a la vista de la entrada de nuevas formaciones minoritarias, es muy amplio. Se pueden dar todas las condiciones y desde el PP estamos trabajando para lograr los mejores resultados porque representamos un proyecto político serio, solvente, equilibrado y con experiencia. Sinceramente creo que el PP puede ganar estas elecciones, puede gobernar en Andalucía y puede demostrar así que la alternancia no es mala y que se puede aplicar no sólo un cambio de gobierno sino un cambio de mentalidad en la gestión pública y en la forma de solucionar los problemas, buscando una sociedad más libre y menos dependiente de las administraciones. Y venimos a estas elecciones con las ideas muy claras, las manos muy limpias y la conciencia muy tranquila.

-¿Deben las elecciones andaluzas influir en las municipales de mayo, debe ser a la inversa o no debería haber inconexión?

-Unas elecciones no deben influir en otras y eso es algo que está asentado en España, donde el ciudadano, en una muestra clara de madurez democrática, cada vez discrimina más su voto. Ahora bien, lo que sí puede influir es que a la hora de tomar su decisión el ciudadano vea que si hay políticas del PP que funcionan en sus pueblos, lo mismo podemos hacer en Andalucía. Y yo no he conocido a nadie que esté descontento de manera importante con la gestión de un alcalde del PP.

-Pero en las elecciones andaluzas, como en las generales, siempre ha imperado la ideología...

-Bueno, pues lo que tenemos que intentar es que no sean unas elecciones ideológicas. En estas elecciones lo que hay que votar es gestión, porque las ideologías, sean las que sean, no dan de comer. La forma de solucionar el problema del empleo no pasa por subirse a un atril y hablar del social comunismo o del libre mercado sino poniéndose manos a la obra y aplicando reformas en la administración, en la forma de entender las relaciones con la sociedad y con los agentes sociales y aplicando bien los recursos públicos. Yo apelo al voto pragmático porque los mensajes mesiánicos sólo han traído a Andalucía paro y pobreza.

-Si el aval del PP en estas elecciones está en sus alcaldes, el handicap está en la diferencia de liderazgo que los andaluces perciben entre Juanma Moreno y Susana Díaz. ¿Está de acuerdo?

-Bueno, sí hay diferencias entre ambos liderazgos, porque Juanma Moreno es mucho más líder. Y me explico: mientras el modelo de liderazgo de Susana Díaz es de cartón piedra y está pasado de moda, porque está sustentado solamente en el carisma, el de Juanma es como el de los grandes líderes de la historia mundial, que es un modelo en el que lo importante es escuchar en vez de hablar, trabajando en equipo y no personalizando la imagen del líder. Juanma Moreno se pone detrás apoyando a su equipo mientras Susana Díaz desprecia a sus compañeros porque se cree ungida por el dedo divino.

-¿Hasta dónde preocupa al PP la irrupción de Podemos?

-Como fuerza política en sí, no nos preocupa ni Podemos, porque sus propuestas son en muchos casos totalmente descabelladas y los andaluces son mucho más moderados, ni otras siglas. Lo que sí nos preocupa son los motivos que provocan esa reacción ciudadana. Porque los responsables políticos tenemos que saber captar ese descontento no para que nos voten sino para solucionar sus problemas.

Antonio Saldaña

Número dos de la candidatura del PP por Cádiz