Rafa Muñoz, entrenador del Centro de Deportes El Palo, sostiene que su equipo se juega "mucho más" que la Real Balompédica en el duelo de la trigésimo quinta jornada del grupo IV de Segunda B que enfrentará a ambos conjuntos el próximo sábado (19:00 horas) en el San Ignacio de la barriada malagueña. "Nosotros necesitamos sumar aún cuatro o cinco puntos para asegurarnos la salvación, mientras que la Balompédica puede que ya no llegue a los cuatro primeros puestos, pero tiene la Copa yo entiendo que medio asegurada, porque goza de mucha ventaja sobre los que le persiguen", reflexiona el técnico.

Muñoz recalca que su equipo ha hecho méritos durante la competición "para sumar más puntos" de los cuarenta que acredita y tener certificada la permanencia a falta de cuatro jornadas. "Lo que sucede es que aunque en todos los partidos hemos creado ocasiones, nos está costando acertar con la portería, sobre todo en la seunda vuelta, y en este deporte si no haces goles, lo pagas", recalca.

El técnico de los paleños es consciente de que la Balompédica presenta mejores números como visitante, pero recuerda que en casa, los suyos "han competido" con todos los rivales que les han visitado.

"A mí la Balona ya me demostró en La Línea, aunque ganamos, que es un equipo sólido atrás, que cuenta arriba con la velocidad de Copi y el trabajo de Hugo Díaz, que sabe muy bien a lo que juega y que estoy seguro que nos lo va a poner muy difícil", abunda.

"Es un equipo experto en Segunda B, con todo lo que eso supone, hecho para estar arriba y que está completando una gran temporada", insiste.

El preparador se refirió también a la incorporación de Salvi, que llegó procedente de la propia Balona el pasado mes de diciembre. "Es un chico que se ha venido a casa y se tiene cómodo, que nos da desequilibrio y que aunque parece que todavía nos puede aportar algo más, ya el domingo pasado cuajó un muy bien partido. Imagino que frente a la Balona jugará muy motivado".

Por el contrario, el míster lamenta las ausencias de otro exbalono, Rafa Villén -que no puede jugar por su condición de cedido- y del experimentado Nacho Aranda, sancionado, pero muy especialmente esta última.