Estudiantes de Ingeniería de Edificación de la Universidad de Granada realizaron el pasado fin de semana una visita a la comarca para tomar datos, con instrumentos fotográficos, de los monumentos más destacados que componen el rico patrimonio histórico y arquitectónico del Campo de Gibraltar.

Casi medio centenar de alumnos que cursa la asignatura Fotogrametría y Documentación del Patrimonio realizaron un interesante recorrido por el castillo de Castellar, el parque arqueológico de las las murallas medievales de Algeciras, el mercado Ingeniero Torroja, el castillo de Guzmán el Bueno y Baelo Claudia.

Acompañados de los profesores José Antonio Benavides y Mariano Martín, especialistas en Fotogrametría e Historia de la Construcción, respectivamente, tomaron datos con diversos instrumentos fotográficos para documentar su situación arquitectónica actual y generar modelos en tres dimensiones.

"El trabajo que realizamos aquí, en el Campo de Gibraltar, como el que hemos hecho en otros lugares de Andalucía que estudiamos, es conocer de un modo integral el objeto arquitectócnico. Conocimiento que engloba tanto el análisis geométrico de las estructuras; su composición (los materiales de que están construidos); la forma en que se construyeron, el análisis de las patologías que les afectan (desplomes, asentamientos, grietas, humedades, agentes atomosféricos, etc); o las fases históricas que le han acontecido, que son la huella que dejan las diferentes civilizaciones sobre el mismo edificio", explicó José Antonio Benavides. Los profesores de la universidad granadina estuvieron acompañados en su visita por el arqueólogo municipal de Algeciras, Rafael Jiménez Camino, y Pedro Gurriarán, consejero de de la Sección Primera del Instituto de Estudios Campogibraltareños (IECG), quien les sirvió de guía a los ingenieros en su recorrido por el municipio de Tarifa.

Los estudiantes llegaron a la comarca acompañados por un dron que tomó imágenes del castillo de Castellar, pero que no pudo ser utilizado por diferentes limitaciones ni en Bolonia ni en la ciudad de Algeciras. "El vuelo con dron es la mejor forma de obtener la fotogrametría y así lo hicimos en Castellar", comentó el responsable de la asignatura. El profesor explicó el proceso que los estudiantes siguen para realizar el trabajo. "El método que hemos establecido consiste en el análisis minucioso de los elementos; la toma de datos topográficos con taquímetros electrónicos o GPS de precisión; la captura de fotografías desde tierra o desde aire con drones o globos aerostáticos; la generación de un modelo 3D del objeto de estudio; y extracción de la información necesaria mediante planos de planta, alzados, secciones o vistas 3D. Toda esta metodología se realiza mediante herramientas BIM (Building Information Modeling), y modelos 3 D de edificios enriquecidos con datos semánticos (dimensiones, material, fecha de construcción, fecha de moficación, etc.). Tras un análisis pormenorizado del objeto arquitectónico y apelando al rigor científico que aportan los datos, se realizan hipótesis de reconstrucción virtual que permite a las personas no expertas comprender mejor las fases constructivas históricas de ese elemento", añadió Benavides.

A todas estas consideraciones técnicas hay que añadirle una última, quizás la más importante: "Toda esta riqueza la hemos heredado de nuestros antepasados y nuestra obligación es conservarla para que también la disfruten las generaciones futuras", concluyó el profesor.