El Pleno extraordinario celebrado ayer en el Ayuntamiento de Los Barrios aprobó el inicio del procedimiento para llevar a cabo la consulta popular en la que se pregunte a los vecinos de la Villa si prefieren que se culminen las obras de la cubierta de la plaza de toros La Montera o su desmontaje para que el coso vuelva a su diseño original.

La propuesta, que fue presentada por el equipo de gobierno (PA-PP), salió adelante con el voto de ambas formaciones. El grupo socialista optó por la abstención mientras que el PIBA votó en contra. Tras este trámite, ahora comienzan una serie de plazos a cumplir para que se pueda llevar a cabo la consulta popular que, según señaló el alcalde, Jorge Romero (PA), "sería algo histórico al ser la primera consulta popular de la comarca".

El primero de esos plazos es la publicación en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) y el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) para dar a conocer públicamente la decisión, tras lo cual se dispondrá de un mínimo de 20 días hábiles para que los vecinos de la localidad y otras administraciones puedan presentar alegaciones.

Tras este procedimiento, será el momento de que la consulta vuelva al Pleno. En este caso, para aprobar el enunciado de la pregunta que se encontrarían los ciudadanos en la papeleta el día de la hipotética votación, tal y como se explica en la Ley de Regulaciones de las Consultas Populares Locales en Andalucía. Este trámite requiere de mayoría absoluta y entre las condiciones de la Ley se especifica que la consulta debe estar redactada de forma inequívoca (que no genere confusiones). De ahí, y en caso de resultar aprobada, la petición debe ser finalmente autorizada por el Gobierno central aunque los trámites de petición formal se efectúan a través de la administración de la Junta de Andalucía.

El debate en sí se inició con un turno de apertura del alcalde. Romero explicó los motivos de esta propuesta, al igual que expuso las cifras económicas que supondría cada opción. Unas cifras que vienen reflejadas en el informe pericial encargado por el Ayuntamiento y que creó discrepancias entre los grupos del gobierno y, especialmente, el PSOE y su portavoz, Salvador Puerto. Romero aseguró que "no queremos tomar una decisión sin consultar a los vecinos de Los Barrios porque ya se viene de un error previo al respecto".

Puerto, por su parte, comenzó asegurando que "por principios, no nos podemos poner en contra de una consulta popular. Lo que no estamos de acuerdo es con los términos en los que se expone y la forma tendenciosa en la que se realizan las conclusiones del informe".

El debate, durante casi dos horas, acabó derivando en el cruce de reproches entre la herencia recibida -desde las bancadas del PA y PP- y las responsabilidades en el mantenimiento de la plaza tanto por parte del gobierno actual como del precedente. El PIBA basó su intervención en relatar la gestión del coso desde 2005.

Las cifras dadas a lo largo de la sesión plenaria, extraídas del informe pericial, fija tres propuestas: desmontar la cubierta con posibilidad de reutilización, por 781.439,92 euros; desmontar la cubierta para achatarrarla, por 731.043,42 euros o reparar la cubierta, en cuyo caso la estimación sube hasta 1.082.869 euros.

Esos fueron los datos defendidos desde el gobierno, mientras que el grupo socialista replicó que en esas cifras se incluyen gastos fijos derivados de la adecuación del recinto a la normativa sin los cuales los costes serían los siguientes: demoler la cubierta con posibilidad de reutilización, 241.526,55 euros frente a la finalización, por 450.867,52 euros. A lo que habría que añadir que, en este caso, se agregan como trabajos la demolición del cuerpo de presidencia que en los presupuestos de desmontaje no aparecen especificados.