El Ayuntamiento de Castellar ha aprobado en pleno la modificación puntual del Plan General Urbano (PGOU), para dos proyectos futuros: la ordenación de la ocupación en precario en terreno municipal y el proyecto de bioconstrucción, incluido en el proyecto de Marajambú.

El primer caso está relacionado con el mantenimiento de caballos y sus instalaciones en el municipio. La normativa general al respecto señalan que deben mantenerse a más de 500 metros de la zona urbana, sin embargo, el PGOU local lo establecía a dos kilómetros del núcleo urbano.

Con el cambio en el planeamiento urbanístico se pretende que los vecinos puedan construir cuadras donde ubicar a los equinos y continuar con esta actividad relacionada con el ocio y el tiempo libre. De esta manera, se da solución a la problemática de los asentamientos irregulares. Desde el Ayuntamiento se considera que un pueblo con tradición agrícola no puede prescindir de unos espacios donde los vecinos puedan tener algunos animales para uso doméstico.

Por otra parte, la modificación puntual del Plan General permitirá la bioconstrucción, es decir el Consistorio permitirá a partir de ahora la edificación de casas con materiales sostenibles como la piedra o el adobe, propias de la zona. "Pretendemos compatibilidad la agroecología con el agroturismo en Marajambú, con el objetivo de crear puestos de trabajo", explicó el alcalde de Castellar, Juan Casanova.

Por otra parte, el primer edil indicó que el Ayuntamiento mantiene una línea de colaboración con instituciones universitarias, como es el Instituto de Sociología de Estudios Campesinos de la Universidad de Córdoba. Varios profesores de esta Universidad junto al ingeniero agrónomo redactor del proyecto de Marajambú, Gustavo Alés, explicaron el pasado fin de semana el proyecto de Soberanía alimentaria como alternativa a la crisis económica y aplicada a la finca Marajambú. Este plan de agroecología dará empleo directo a unas 40 personas y se incluirán otras empresas relacionadas con esta actividad como granjas relacionadas con lombrices y gallinas para realizar compost, por lo que se produciría un autoabastecimiento.

Esta disciplina científica se basa en la aplicación de los conceptos y principios de la ecología al diseño, desarrollo y gestión de sistemas agrícolas sostenibles. "Estamos buscando apoyos de distintas universidades para que el proyecto que vamos a presentar al consejero de Agricultura, Luis Planas, esté apoyado por la Universidad", añadió el regidor castellarense, quien apuntó que está a la espera del encuentro con el titular de Agricultura, tras el anuncio de que la finca no iba a ser subastada.