En pocas ocasiones una victoria puede ser más amarga, ni una derrota más dulce. Juan Casanova (IU)  será, al igual que sucediera hace cuatro años, el alcalde de Castellar si se repite el pacto con la única concejal de PP que, como entonces, vuelve a tener la llave de la gobernabilidad del municipio chisparrero. Si entonces fueron 47 los votos que separaron a ambas formaciones, en esta ocasión han sido apenas ocho los que han privado a IU de considerarse como la fuerza más votada frente al PSOE. De nuevo Pilar Lobato tiene en su mano, al igual que sucediera hace cuatro años, la gobernabilidad de la localidad más pequeña del Campo de Gibraltar. Aún cuando, teniendo en cuenta la política nacional y regional, un pacto entre PP e IU pudiera parecer contra natura, en Castellar funciona desde hace cuatro años.

Francisco Vaca (PSOE), el ganador de las elecciones, lo daba por hecho tan pronto como cerrado el recuento, se confirmaba su victoria. "La verdad es que estamos contentos por la victoria, especialmente si tenemos en cuenta que el índice de participación ha superado el 80%, por lo que es algo que debemos felicitarnos todas las fuerzas políticas que concurrimos a las elecciones". Aunque dolido porque sabe que no podrá ser alcalde a pesar de que, por segunda ocasión gana las elecciones, Vaca no muestra resquemor alguno: "lo que está más que claro es que los vecinos son soberanos con sus decisiones; ellos han decidido lo que quieren para su pueblo y, por supuesto debemos respetarlos todos, es su decisión soberana y yo no puedo sino felicitarles a todos, tanto los que me han dado su confianza, como los que no, por esa decisión". Sobre su papel, del que no le queda dudad alguna que será en la oposición ("el pacto se va a reeditar porque no hay ninguna razón objetiva para que se pueda romper"), el candidato socialista asegura que "será el lugar en el que me han colocado mis vecinos por lo que debo respetarlo".

Quien volverá a ostentar el bastón de mando de la localidad chisparrera, Juan Casanova,  manifestó su "agradecimiento a todos los que nos han dado sus votos"  y sobre las futuras conversaciones con la única concejal del PP, quiso dejar claro que "confío plenamente en que el acuerdo que alcanzamos y por el que se ha permitido gobernar durante estos últimos cuatro años, pueda reeditarse,  "sin mayores dificultades, aunque eso se cerrará a partir de los próximos días cuando comencemos las conversaciones; confío plenamente en que podamos repetirlo".

No quiso ir más allá la aludida, Pilar Lobato, quien después de conocerse el resultado definitivo de la totalidad de los votos escrutados y a pesar de asegurar que "aún no he llamado a Juan Casanova, estoy convencida de que podremos sentarnos y hablar  sobre las mismas bases que se hicieron en el pasado mandato". Lobato también quiso agradecer la confianza depositada en ella por "los vecinos de Castellar, que nos han vuelto a colocar en una posición en la que podremos influir en la futura composición del Ayuntamiento, por lo que es para estar más que satisfecha por lo conseguido".