Algeciras

Varios cientos de jóvenes reclaman en la calle una universidad pública

  • Los estudiantes rechazan el Plan Bolonia criticando el criterio mercantilista de una formación que consideran devaluada

Los estudiantes tomaron ayer la calle para protestar contra la reforma universitaria propuesta a nivel europeo a través del Plan Bolonia. Con mensajes demandando becas y no hipotecas, y en defensa de una universidad pública, cerca de 300 jóvenes se dieron cita en la Plaza Alta de Algeciras.

Convocaba la Asamblea de Estudiantes de Enseñanzas Medias con el apoyo de IU, Juventudes Comunistas y CCOO. También se sumaron jóvenes de Los Barrios y Tarifa. Con la lectura de un manifiesto, dejaron claro su postura contraria a unos estudios de grado donde el título "no te valdrá de nada, serás un mero graduado de generalidades en tanto no te especialices con el posgrado".

La dificultad en acceder a los nuevos máster es otro de los puntos críticos, sólo permitidos a "unos pocos privilegiados". Pero también lo son las becas, ofertadas a modo de préstamos por parte de la banca privada.

"En opinión de Miguel García, portavoz de los convocantes, la respuesta ha sido muy positiva y permitirá "unificar todo el Campo de Gibraltar y hacernos escuchar". Explicó su postura porque "somos los hijos de los trabajadores quienes salimos perdiendo".

García destacó que ellos no están en contra de la equiparación europea de las titulaciones, sino de la forma en cómo lo quieren hacer, al servicio de los intereses de las grandes empresas y de la banca. "No somos un producto, somos alumnos, pensamos. No somos un material que se pueda comprar o vender".

Para Ernesto Alba, secretario de Juventudes Comunistas, la responsabilidad de la educación debe recaer en el Estado y dijo que teniendo en cuenta los problemas en Torraspapel o Interquisa, "las grandes empresas, que han creado un problema de paro, no pueden ser una solución para gestionar el modelo de universidad".

Mientras, unos 50 estudiantes se concentraron a las puertas del Ayuntamiento de La Línea. En una protesta pacífica, sus representantes criticaron que "cobrándonos 3.000 euros, las becas las quieren convertir en créditos para que una vez finalizada la carrera las tengamos que devolver y con intereses".

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