La cifra final de la superficie arrasada en el incendio del Arroyo de la Miel ha quedado en 166,88 hectáreas, casi 27 más de la medición provisional que fue realizada por el dispositivo para la Prevención y Extinción de Incendios Forestales de la Junta de Andalucía, el Plan Infoca. Una vez declarado extinguido a las 18:05 horas del pasado miércoles se procedió al cálculo final, constatando que se quemó más terreno del inicialmente valorado, estando en 140 hectáreas.

Lo que aún queda por aclarar es el origen del mismo. La Brigada de Investigación de Incendios Forestales (BIIF) desde el primer momento se trasladó al lugar, entre los molinos de Escalona y el Águila en El Cobre, para tomar referencias y estudiar las posibles causas.

No obstante, tanto el alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, como el subdelegado del Gobierno de la Junta de Andalucía, Ángel Gavino, no dudaron en apuntar a la mano del hombre a las pocas horas de iniciarse el pasado 24 de julio, en torno a las diez y cuarto de la noche. El Infoca también se mostró clarificador en una nota de prensa enviada por parte de la delegación territorial de Medio Ambiente que apuntaba que "no se trata de un hecho natural, es decir, la mano del hombre está detrás de forma intencionada o negligente".

En cualquier caso, mientras se dirimen las causas y el origen, y a la espera de que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad localicen al causante o causantes, el paraje ha quedado totalmente desolado, entre parque natural de Los Alcornocales y los montes públicos de Algeciras cercanos a Botafuegos.

Hace poco más de un mes también se registró en el Arroyo de la Miel un incendio forestal, sin embargo al declararse sobre la ocho de la tarde dio tiempo a la intervención de los medios aéreos, atajando el fuego antes de que derivara en una catástrofe natural, como se ha venido calificando el último desde diferentes frente. El incendio citado arrasó unas 2,5 hectáreas y sí se concluyó que fue intencionado. En este caso desde Medio Ambiente se apeló de nuevo a la colaboración ciudadana, para que se implique en esta causa, que ante cualquier movimiento o actuación en esas zonas naturales advierta.

Por otro lado, las cifras demuestran que en apenas un mes de lo que lleva la temporada estival 2014 ya se ha superado con creces desgraciadamente el terreno calcinado en todo el pasado verano. El primero y de mayor envergadura se registró el 30 de agosto en los montes de Comares, al igual que éste último se generó un gran revuelo y fueron más de 170 las llamadas que registró Emergencias 112. El fuego se originó a las 20:50 horas, lo que propició de nuevo que los medios aéreos no pudieran trabajar en las primeras labores de extinción. El segundo más importante del verano fue más tardío, declarándose el 17 de septiembre y que quemó alrededor de 60 hectáreas en la zona del Cortijo de la Hoya.

En total fueron 140 hectáreas en todo el verano de 2013 aproximadamente, que contrastan con las 167 que ahora se han quemado en el Arroyo de la Miel y en la que trabajaron más de 250 profesionales y un total de 23 medios aéreos, estando casi 24 horas en activo y que tardó 48 en darse por controlado.