El swing se desarrolló en los clubes nocturnos de Harlem durante la década de 1920 y se hizo popular junto con el jazz, estilo musical al que está muy unido. Surgió como una fusión de diferentes estilos de baile africanos y europeos y hay varios estilos: el Lindy Hop es uno de los más conocidos y es una mezcla de movimientos de charleston y breakaway entro otros. También está el Charleston, que se caracteriza por movimientos rápidos y enérgicos.

Este baile está acompañado por la música del mismo nombre, el swing, un estilo de jazz que se caracteriza por su ritmo y su energía contagiosa. Artistas como Benny Goodman, Count Basie y Duke Ellington son algunos de los músicos representativos de este género, que ha llegado con muy buena salud hasta la actualidad.

Además de ser divertido, se dice que el baile swing también tiene beneficios para la salud, ya que es una forma de ejercicio cardiovascular que ayuda a mejorar la coordinación, el equilibrio y la flexibilidad. Cabe resaltar que este tipo de música genera un clima muy alegre y agradable, tanto para quienes lo practican como para sus espectadores.