Pleno largo y sin sorpresas en el Ayuntamiento de Granada este viernes, donde se han colado en el momento más tenso cruces de pareceres sobre la decisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de tomarse unos días de reflexión para ver si continúa o no en el cargo, y que ha acabado en una llamada de PP y PSOE a rebajar el tono en las intervenciones y a no salirse del orden del día. En lo institucional, han salido adelante la actualización de las ordenanzas municipales de la Convivencia y de la Gestión de Residuos y Limpieza Viaria, aunque el PSOE ha afeado al equipo de gobierno que haya "escondido" en las comisiones decisiones que "van contra la ciudadanía" como la ampliación en la ciudad de la zona azul de aparcamiento.

En ambas normativas se tipifican y endurecer las sanciones por conductas y comportamientos "contrarios a la convivencia y al mantenimiento del ornato público". Entre otros aspectos, la norma aumentas los castigos y da soporte legal a la Policía Local frente a la realización de botellones, las despedidas de soltero o las pintadas vandálicas.

El concejal de Presidencia en el Ayuntamiento de Granada, Jorge Saavedra, ha recordado que la aprobación de estas dos nuevas ordenanzas renueva un ordenamiento normativo que estaba "caduco, inoperativo e ineficaz". En el caso de la Convivencia databa de 2009, mientras que la normativa municipal para regular la limpieza era de 2006, por lo que "nos encontrábamos que en aspectos tan decisivos para la ciudadanía como el derecho al descanso o el mantenimiento y limpieza de la ciudad, este Ayuntamiento no disponía de las herramientas idóneas y adecuadas para ofrecer una respuesta contundente y eficaz".

Convivencia

En el caso de la normativa de Convivencia, el Ayuntamiento culmina de forma unánime la tramitación que inició con su aprobación en Junta de Gobierno Local el 24 de agosto pasado y que elaborado, "de la mano de la hostelería", prevé la prohibición de "actitudes no recomendables", con sanciones tipificadas como leves que van hasta los 750 euros, como son: ir sin ropa por la calle, llevar atuendos o disfraces de contenido xenófobo, racista u homófobo, el uso de aparatos de amplificación de sonido o imagen sin autorización y el desarrollo de botellones y consumo de alcohol en la vía pública.

La concejala de Protección Ciudadana, Ana Agudo, ha destacado la enorme trascendencia de la nueva normativa en tanto que establece un marco de regulación y control para abordar en Granada la "casuística generadas por las despedidas de soltero y los botellones", a la vez que aporta información a la ciudadanía sobre las "actitudes, comportamientos y actuaciones no recomendables en nuestra ciudad en el desarrollo de este tipo de celebraciones".

La modificación conlleva la incorporación de una nueva sección en el Título II, denominado "Normas de conducta en el espacio público, infracciones, sanciones e intervenciones específicas" en su capítulo V, con epígrafe "Otras conductas en el espacio público", referido a la regulación y sanción de las "conductas contrarias a las pautas mínimas de comportamiento generalmente admitidas en el uso y disfrute de los espacios públicos por parte de la pluralidad de personas existente en la ciudad".

Según ha explicado, una vez aprobado y en base a la "urgencia" de su aplicación para "garantizar el control de los comportamientos incívicos", el gobierno municipal tiende la mano a una futura "mejora" del texto aprobado si bien "siempre velando por el cumplimiento del principio de seguridad jurídica y la idoneidad de su aplicación".

Una vez puesta aprobada la nueva Ordenanza, según ha señalado, la Policía Local de Granada o los servicios municipales competentes, se limitarán inicialmente a recordar a las personas que incumplieran esta norma que dichas prácticas están prohibidas. Si las personas persisten en su actitud, se procedería al iniciar del correspondiente procedimiento sancionador con una categoría de infracción leve (entre 1 y 750 euros). Los agentes podrán intervenir cautelarmente los medios empleados.

El debate sobre esta modificación ha sido largo por la intervención del concejal socialista Eduardo Castillo, ya que ha enumerado problemas que no aborda esta ordenanza a través de un paquete de 23 alegaciones presentadas por el PSOE, pidiendo una "mayoría" amplia que suscitara el "consenso" para su aprobación. "Es una ley que tiene 200 artículos y quince años de antigüedad. Era reflejo de los problemas de la ciudad entonces", expresó Castillo, que dijo que el mayor desacuerdo con la nueva norma es que peca de "falta de ambición" y que en diez meses de gobierno del PP "la única propuesta sea añadirle diez líneas" a la ordenanza. A esto, la concejal Ana Agudo, puntualizó en que con la modificación aprobada se da respuesta inmediata a un problema concreto, y que más adelante se va a "abordar" toda la norma para "hacer una revisión más pausada".

Limpieza

La nueva ordenanza de Gestión de Residuos y Limpieza Viaria de la ciudad también aumenta las sanciones por por pintadas vandálicas, que ahora pasan a considerarse "muy graves" en los casos de que se realicen en entornos protegidos de la ciudad, tengan un coste de limpieza de 200 euros y atenten contra derechos fundamentales o contengan expresiones sexistas, racistas o xenófobas, para lo que se establecen multas de hasta 3.000 euros, pasando de 1.500 a esta cantidad, el máximo que permite la ley que impongan los ayuntamientos. El apoyo de los grupos ha sido mayoritario, con la abstención de Vox.

Pero van a más. En el caso de pintadas contra Bienes de Interés Cultural, inscritos en el catálogo del Patrimonio Histórico Andaluz, el Ayuntamiento de Granada dará traslado a la Junta de Andalucía, en tanto que institución competente en materia sancionadora, que prevé sanciones de hasta 100.000 euros en el caso de infracciones tipificadas como leves y de hasta 250.000 para los casos graves.

El texto prevé "sanciones mucho más cuantiosas" en el caso de pintadas vandálicas en edificios y bienes municipales, ya que en aplicación de la Ley de Bienes de Entidades Locales de Andalucía se estipulan para el caso de infracciones muy graves, multas de 15.025 a 30.050 euros; de 3.000 a 15.025 para las graves y de 60 a 2.900 euros en el caso de las leves.

El portavoz municipal, Jorge Saavedra, ha recordado que la ciudad dispone ahora del "marco normativo indispensable" para continuar con el compromiso "firme, implacable y concienzudo" de este gobierno municipal para conseguir una Granada libre de pintadas, "que tanto afean y desmerecen la belleza de una ciudad sin igual", ha dicho.

Se "incide" también en aspectos relacionados con "el incumplimiento" de la retirada de los excrementos de los perros de la vía pública, "estableciendo por primera vez, la obligación de reducir el impacto de los orines, para lo que los propietarios de los canes deberán dotarse de un recipiente y verter agua y un desinfectante no irritante sobre el pis del animal. El incumplimiento de esta media se considerará "infracción leve" con multa de 200 a 750 euros.

En materia de recogida de residuos, la nueva ordenanza de Gestión de Residuos y Limpieza Viaria incluye la competencia del Ayuntamiento de Granada en la gestión integral de los residuos domésticos y subsidiariamente de los procedentes del sector comercial y estipula la obligación de los hogares y las actividades industriales, comerciales y de servicios de separar en origen las diferentes fracciones de residuos (orgánica, envases, vidrio…).