El 10 de diciembre de 1993, se lanza id Software lanza Doom, un juego FPS (siglas en inglés de First-Person Shooter) de temática de ciencia ficción y terror. Es considerado uno de los títulos más importantes e influyentes en la industria del videojuego por haber impulsado la popularidad del género de los FPS.

Doom se divide en tres episodios de nueve niveles. En 1995, se lanza Destino final, una versión actualizada del juego con un cuarto episodio. En este videojuego, los jugadores asumen el papel de un marine espacial, que llegó a ser conocido popularmente como Doomguy, abriéndose paso a través de hordas de demonios invasores del infierno.

Unas 10 millones de personas jugaron dentro de los dos primeros años de su lanzamiento. Su popularidad (por la modalidad de juego) generó una subcultura de juego. Su influencia ha sido tal que en la década de los 90 aparece una serie de video FPS y son conocidos como clones Doom. También fue uno de los juegos pioneros en gráficos inmersivos 3D, juegos multijugador en red y soporte para las ampliaciones.

Una vez que id Software liberó el código fuente del juego fue lanzado en 1997, dio lugar a más adaptaciones, donde los fans portan el código a un mayor número de dispositivos. El primer videojuego FPS fue Maze War, también fue el primer videojuego multijugador (en red local). Pero la salida de Wolfenstein 3D (1992) y Doom (1993) fueron los que impulsaron el mercado de videojuegos en FPS.

Posteriormente, en 1996 y 1998 salieron juegos como Quake, Duke Nukem 3D (ambos de 1996) y Half-Life (1998) que revolucionaron el género por sus gráficos, jugabilidad y por el modo multijugador en línea y en red local. Aparte de estas mejoras, Half-Life daba la posibilidad de relacionarse con otros personajes no jugadores.