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Análisis 'Partisans 1941'

  • Un título de estrategia bélica profundo y divertido, que cuanto más juegas más te engancha

Tráiler de 'Partisans 1941'.

Desarrollado por el estudio ruso Alter Games y publicado por Daedalic Entertainment, Partisans 1941 es un título de estrategia que no esconde sus influencias de otros juegos, primordialmente de Commandos, la obra original de Ignacio Pérez Dolset y Gonzo Suárez bajo el sello de la mítica Pyro Studios. La entrega nos lleva hasta la Segunda Guerra Mundial, en el frente oriental durante la ocupación nazi. Una nueva versión del género táctico que mezcla combate, sigilo, emboscadas y variedad de elementos especiales para llevar el caos a las filas enemigas. Además, podemos elegir la forma de completar cada misión. Suena bien, ¿verdad?

Elige tu forma de completar cada misión

En Partisans 1941 controlaremos a Alexey Zorin, un prisionero de guerra que logra escapar de un campo de concentración nazi. Antes de ser arrestado, era comandante de las tropas rusas y cuando logra escapar, decide crear un movimiento de resistencia contra los nazis. Bajo este pretexto, Partisans nos permite encabezar la resistencia contra la invasión nazi en el Frente Oriental. Poco a poco, Alexey comenzará a reclutar elementos para su resistencia y, como la necesidad es apremiante, podrá reclutar tanto soldados como civiles. Por suerte, los personajes tienen árboles de habilidades que permiten mejorar a todos y cada uno de los miembros de la resistencia.

La totalidad de los personajes tiene sus propias características y habilidades específicas que son útiles en determinadas circunstancias, de modo que las misiones irán desde sabotajes selectivos hasta extensos ataques a las líneas de suministro alemanas, que tendrán diferentes tipos de resolución.

Una imagen del juego. Una imagen del juego.

Una imagen del juego.

El recurso de la pausa táctica

Para luchar con éxito contra las fuerzas de ocupación, es importante explorar entornos, encontrar la mejor posición para atacar a tus enemigos y controlar el flujo del combate mediante el uso eficaz de la pausa táctica. Dado que en Partisan 1941 es necesario organizar auténticas estrategias de guerrilla, si las cosas empiezan a ir mal, siempre tienes la oportunidad de poner el juego en pausa, tomar un respiro y evaluar la nueva situación para modificar la estrategia.

Durante las misiones, también tendremos que gestionar el campamento, que a su vez servirá para mejorar las tropas y el armamento a la par que permite distribuir los recursos disponibles. Podremos incluso formar un escuadrón y enviarlo a realizar misiones automatizadas o meternos de lleno en la batalla.

Una imagen del juego. Una imagen del juego.

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Una guerra muy aparente

Desde un punto de vista técnico, el título de Alter Games funciona muy bien, incluso en máquinas antiguas. Aunque los gráficos no se pueden considerar como superrealistas, el impacto que produce en pantalla le permite lucir un tono bastante serio. También porque, afortunadamente, no se ha censurado nada: prepárate para esvásticas, águilas y cruces negras. Además, el lenguaje utilizado también es bastante fiel, lo que aumenta la inmersión. Resulta mucho más inmersivo escuchar a un alemán hablar en su lengua materna como sucedía en Commandos, mientras maltrata a los presos.

Una imagen del juego. Una imagen del juego.

Una imagen del juego.

Conclusiones

Partisans 1941 ofrece una perspectiva completa y profunda de género, además de una interesante narrativa sobre este periodo de la Segunda Guerra Mundial donde podemos experimentar la historia de la feroz resistencia contra la ocupación alemana en el frente oriental. Pero llegamos a la parte más interesante para nuestra economía: ¿merece la pena? Absolutamente sí, el juego nos invita a vivir la vida de un grupo de resistencia, experimentar la rutina de un partisano entre misiones, desarrollar su base, prepararte para las próximas misiones, asegurarte de tener los recursos necesarios para la supervivencia, mantener las tropas motivadas, explorar regiones y por supuesto luchar aprovechando las debilidades para atacar al enemigo. Un título profundo y divertido que cuanto más lo juegas, más te engancha.

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