Tarifa

Un mural en Tarifa homenajea a las víctimas del Estrecho

  • Varias personas migrantes y vecinos recubren uno de los muros del IES Almadraba

El mural, recién terminado.

El mural, recién terminado. / E. S.

Más de 50 personas, migrantes y campogibraltareñas, participaron este sábado en la elaboración conjunta de un mural reivindicativo en Tarifa, municipio donde hace 30 años apareció el primer cadáver de una persona migrante, el 1 de noviembre de 1988.

La actividad, organizada por la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía en el Campo de Gibraltar, se celebra esta semana con motivo de esta “macabra efeméride” la conmemoración el pasado lunes del 70 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y ha tenido como objetivo homenajear a las cerca de 8.000 personas que en estas tres décadas, que según las estadísticas de la asociación, han perdido la vida en el Estrecho, “fruto de políticas que cierran a cal y canto las vías de entrada al país y que abocan a las personas a rutas letales”.

Solo en el mes de noviembre, 146 personas han muerto o desaparecido en nuestras costas, y las cifras se elevan a casi 800 en lo que va de año. No obstante, según la Organización Internacional para las Migraciones, por cada persona fallecida, hay dos más por confirmar. “Cada vez que somos conocedores de una nueva víctima en nuestro querido Estrecho de Gibraltar, nos duele nuestra tierra, y no podemos evitar sentir rabia e indignación al constatar una nueva pérdida humana en tan solo 14 kilómetros que separan España del continente africano. Es inconcebible”, denuncian desde la organización, que ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Tarifa

El mural, de 12 metros de largo se ha realizado sobre la tapia del Instituto Almadraba como colofón de un proceso creativo que ha partido de las personas migrantes supervivientes del trayecto y que han plasmado su propia visión y sentir en el boceto que ha dado lugar al mural. Para ello, se ha contado con la colaboración de artistas locales del Campo de Gibraltar, como Peti Jiménez, creador del colectivo Fundarte. Gran parte de las personas migrantes que han participado en todo el proceso de elaboración del mural, son solicitantes de asilo actualmente acogidas en Fundación Cruz Blanca, Cear y otras entidades de Algeciras y localidades cercanas.

El proyecto se ha planteado considerando el arte como una poderosa herramienta de denuncia social, capaz de remover conciencias y cuestionar la inacción de la sociedad y de la clase política ante el drama migratorio.

Varias personas esbozan el mural. Varias personas esbozan el mural.

Varias personas esbozan el mural. / Jorge del Águila

De este modo, la obra artística colectiva pretende ser un acto de reivindicación social que perdure en el tiempo y un homenaje a las víctimas, que contribuya a la desnaturalización de las muertes en nuestras costas, creando un impacto visual que sensibilice a la sociedad y facilitando la oportunidad para la convivencia, la creación de nuevos vínculos y el intercambio, en el que se han puesto en valor las percepciones y la dignidad de las personas supervivientes de las fronteras.

Para la organización, la Frontera Sur se ha convertido en “un espacio de muerte y sufrimiento obscenamente olvidado”. Esta obra, explican, viene a “romper esa indiferencia, a hacer visible lo invisible y a reconocer la voz a los que se la han arrebatado, en un contexto de “virulento retroceso” de los derechos humanos en nuestro país, donde hoy más que nunca es necesaria una implicación ciudadana contra las injusticias y violaciones de los derechos más básicos de las personas.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios