En estos días, más de 10 jóvenes de distintas nacionalidades se han visto en la calle después de que la administración andaluza ordenase su desalojo de los centros de menores donde estaban tutelados.

Marruecos y Guinea Conakri son los dos grandes focos, seguidos de Malí, Costa de Marfil y Argelia. En los últimos cuatro años sólo han entrado por mar 19 personas procedentes de Siria. La llegada de pateras ha bajado un 41% desde que se activó la colaboración entre Madrid y Rabat.

Los "actos vandálicos" tienen un trasfondo racista. “Somos conscientes de la problemática pero la Macarena está saturada de centros”, dicen los vecinos.

La Policía deja de trasladar a los menores a los centros de acogida, pero éstos tampoco tienen personal para recogerlos durante los fines de semana. Los adolescentes se pasan la jornada en la sede policial, sin comer y tirados en el suelo, custodiados por dos policías que han de retirarse del servicio en la calle.

Un grupo de asociaciones y sindicatos se ha concentrado hoy martes en la plaza del Arenal bajo el lema 'Por una acogida digna". La protesta coincide con la celebración del Día de los Derechos de la Infancia.

La Consejería ha tenido que habilitar otro medio millar de plazas de urgencia este mismo fin de semana.

La plantilla del centro de protección de Marchena se manifiesta por el desbordamiento de las instalaciones.

Los doce jóvenes aprovecharon un traslado para iniciar su huida. Los trabajadores del centro se ha manifestado para exigir más medios dada la saturación que sufren.

Valpuesta advierte que el problema de la inmigración "se nos ha ido de las manos" y lamenta que no se les pueda ofrecer los recursos previstos para su formación.