Un incendio declarado en un garaje de la urbanización Torrealta obligó a desalojar las viviendas colindantes al propagarse rápidamente el humo por los sistemas de ventilación.  A pesar de la alerta desatada, todo quedó en un susto y solo se produjeron daños materiales en el garaje afectado. 

El suceso ocurrió ayer, entre las 18.23 y las 22.24 horas, según los datos aportados por el Consorcio Provincial de Bomberos de Cádiz. Dos de guardias del parque de bomberos de San Fernando -al coincidir el incidente con el cambio de turno- intervinieron para sofocar el incendio de este garaje emplazado en una promoción de viviendas unifamiliares que se extiende entre la trasera del Observatorio y la avenida Pery Junquera. 

Según los bomberos, "todo apunta a una combustión muy lenta en el garaje afectado". Eso sí, produjo grandes cantidades de humo que se extendieron por las rejillas de ventilación al resto de garajes de la urbanización e, incluso, a algunas viviendas que estaban comunicadas. 

Por seguridad, se desalojaron las viviendas. Cuando la primera dotación de bomberos se personó en el lugar del suceso, los vecinos ya habían intentando apagar el fuego con varios extintores, pero no habían tenido éxito. 

A través del acceso de la parte trasera, los efectivos contraincendios accedieron al interior del garaje, donde existía una gran concentración de humo y altas temperaturas. Con cuatro extintores de polvo y, posteriormente agua, controlaron el incendio. Fue necesario también refrescar las paredes con agua pulverizada para bajar la temperatura acumulada y evacuar los humos condensados en la plaza. 

El fuego afectó a una estantería ubicada en el interior del garaje donde se almacenaban diversos productos (aceites, pinturas...). De hecho, constatan los bomberos, fueron las elevadas temperaturas las que afectaron al material almacenado en el garaje, a la instalación eléctrica y a los saneamientos. 

Una vez controlada la situación, se procedió a ventilar el resto de garajes y a inspeccionar las viviendas para comprobar su estado. La falta de viento dificultó la tarea, si bien los bomberos detectaron la existencia de un sistema de extracción de humo en la urbanización cuya existencia desconocían los residentes. En total se emplearon 1.500 litros de agua.