El uso de plantas trepadoras cada vez está más extendido, y no sin motivo. Este tipo de plantas, además de generar múltiples beneficios, son un increíble recurso visual para nuestras paredes en cualquier estación del año. Si queremos alargar nuestro jardín o dotar nuestras paredes de más esteticidad, las plantas trepadoras son nuestro aliado perfecto.

Se tratan de plantas que resisten eficazmente las altas temperaturas, tanto frío como calor, y además la mayoría de ellas generan flores que las dotan de un valor estético muy buscado. 

Campanilla morada

campanilla morada

Este tipo de planta, conocida popularmente con nombres tan curiosos como ipomea, Don Diego de Día o campanilla morada, es un género popular de arbustos de tipo perenne. Sus flores son muy preciadas debido a su color y a su diámetro de alrededor de 3 y 6 cm. Su principal época de florecimiento se da desde el verano hasta la llegada del otoño por lo que su cultivo en estos momentos es de lo más propicio. Puede alcanzar hasta los 2-3 metros de altura. 

Jazmín real

Jazmín real

Consiste en un arbusto trepador con origen en el noreste de África y algunas zonas de Arabia y puede soportar temperaturas de hasta -6ºC, por lo que su cultivo en estas fechas no debe despertar ningún tipo de inquietud con la llegada de temperaturas bruscas. Cuenta con un gran aroma y es el complemento ideal para pérgolas u otro tipo de soportes. Sus flores son de color blanco y suelen ser muy usadas en la elaboración de todo tipo de perfumes. Pueden rondar una altura de 4 a 6 metros.

Hiedra

hiedra

Una de las plantas trepadoras más reconocidas por antonomasia. Puede llegar hasta los 10 metros de altura y su característico color verde intenso caza con cualquier tipo de estructura. Soportan muy bien la falta de luz por lo que se puede usar tanto en interiores como en exteriores. Con origen europeo, existen dos tipos de hiedras: la hiedra común, conocida bajo el nombre de Hedera Helix y la hiedra canaria, Canariensis. 

Plumbago

plumbago

Este arbusto trepador, conocido bajo la denominación Plumbago auriculata, tiene su origen en la región de Sudáfrica. Es una de las especies más cultivadas debido a su gran valor decorativo, gracias a las flores que lo componen, conocidas como jazmín azul. Se trata de una planta perenne que puede llegar a crecer hasta los 4 o 5 metros de altura. Su tiempo de florecimiento se extiende a todo el año, a excepción del invierno.

Enamorada del muro

Enamorada del muro

Este árbol caducifolio, también conocido como Parravirgen, es un tipo de planta de gran y rápido crecimiento. Además, con la llegada del otoño sus hojas cambian a tonos más naranjas y rojos. Tiene su origen en Japón, China y Vietnam y puede crecer hasta los 6 y 8 metros de altura. Su gran densidad hace que sea una planta muy usada para tapar muros o paredes, así como delimitar zonas.

Rosal trepador

Rosal trepador

Uno de los más demandados por los amantes de las plantas trepadoras y, junto a la hiedra, uno de los más conocidos. La época propicia para su crecimiento es únicamente la primavera. A pesar de florecer tan solo una vez anualmente, lo hace de forma abundante. Sus ramas largas pueden adaptarse a una gran variedad de soportes y pueden alcanzar hasta los 10 metros de altura. Es una planta que necesita sol, del cual se beneficia y busca. Existen tantos tipos de rosal trepador como rosas existen, por lo que su uso es muy extendido.