Sociedad

Coronavirus en EEUU: Washington inicia la cuarentena

Mensaje de alerta emitido por la alcaldía de Washington.

Mensaje de alerta emitido por la alcaldía de Washington. / EFE

La ciudad de Washington, capital de Estados Unidos, inició este pasado miércoles una cuarentena por el coronavirus que se alargará, en principio, hasta el próximo 24 de abril. Decretada por la alcaldesa, la demócrata Muriel Bowser, la norma entró en vigor a las 22:00 hora local (02:00 del jueves GMT). Dos horas antes del inicio de la cuarentena, Bowser envió una alerta de emergencia a los residentes en Washington con este mensaje: "Quédese en casa. Usted juega un papel crucial para detener la propagación del Covid-19 en DC".

La cuarentena incluye el cierre de los negocios no esenciales, como peluquerías, gimnasios, tiendas de ropa, teatros, guías turísticas, discotecas, bares y restaurantes. A estos últimos, no obstante, se les permitirá seguir operando con servicios a domicilio. Seguirán abiertos supermercados, centros de salud, farmacias, licoreras, bancos, clínicas veterinarias, guarderías, talleres mecánicos y tiendas de bicicletas. Las escuelas, por su lado, ya cerraron el pasado día 16.

Washington, se une así a otros 18 estados de EE.UU. que han decretado cuarentenas y donde residen cerca de la mitad de los estadounidenses. Se trata de Nueva York (principal foco del virus en el país), California, Michigan, Colorado, Nueva Jersey o Illinois. En Washington hay 231 positivos por Covid-19 (48 en las últimas 24 horas) y tres fallecidos. En Estados Unidos la cifra de enfermos rebasa ya los 66.000 y la de muertos es de al menos 944.

El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha manifestado su interés en que las medidas de contención concluyan para el 12 de abril, domingo de Pascua, por temor a una recesión, aunque son los estados quienes tienen la última palabra.

Medidas fiscales

Los decretos de cuarentena llegan en paralelo a la negociación del mayor paquete de estímulo fiscal de la historia moderna del país para tratar de contrarrestar los efectos de la pandemia, con un valor calculado de dos billones de dólares, que tras ser aprobado este viernes por el Senado será votado el viernes por la Cámara de representantes. Después pasará a manos de Donald Trump, que ya ha avanzado que lo ratificará de inmediato.

El montante de este paquete de estímulo fiscal suma el triple del puesto en práctica en 2008 tras el estallido de la crisis financiera, que ascendió a 700.000 millones de dólares. La propuesta actual incluye una partida de cerca de 250.000 millones que se reservarán para pagos directos de 1.200 dólares a individuos y familias con una renta de menos de 75.000 dólares al año, más 500 dólares por menor de 17 años. Asimismo, se disponen 350.000 millones en préstamos para pequeñas empresas y otros 250.000 millones para ampliar los beneficios por seguro de desempleo. También otorga 150.000 millones de dólares para apoyo a las autoridades locales y estatales, y otros 130.000 millones para reforzar el sistema sanitario, que en algunos lugares como en el estado de Nueva York comienza a estar saturado.

Uno de los elementos más disputados ha sido el fondo de 500.000 millones en préstamos para empresas en dificultades, como los sectores de las aerolíneas, el hotelero o el de los cruceros, ya que la Casa Blanca y los republicanos querían que fuese administrado exclusivamente por el Tesoro. Tras la oposición de los demócratas, finalmente estará sujeto a la supervisión de un inspector independiente, y conlleva condiciones como limitar el salario de los ejecutivos así como la prohibición de que se usen los fondos de rescate para la recompra de acciones.

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