Cuidado de la piel

Pasos imprescindibles para preparar la piel a la exposición solar

Pasos imprescindibles para preparar la piel a la exposición solar

Pasos imprescindibles para preparar la piel a la exposición solar

Las altas temperaturas y el sol hacen acto de presencia con la entrada del ansiado   verano. Imprescindible para sintetizar la vitamina D que nuestro cuerpo necesita, para mejorar nuestro sistema inmunológico e incidir positivamente en nuestro estado de ánimo, pero perjudicial en exceso. Así es nuestro querido sol. Y, aunque cada vez es más la gente concienciada de la importancia de protegerse de los rayos solares y así evitar efotoenvejecimiento prematuro y al cáncer de piel, siempre está bien recodarlo. Y, sobre todo, prepararnos.  Te contamos los pasos imprescindibles para preparar tu piel a la exposición solar, aunque recuerda que debes cuidar tu piel de sus efectos durante todo el año.

PASOS PARA PREPARAR LA PIEL AL SOL

  • Limpieza

La piel, el mayor órgano de nuestro cuerpo, funciona como una barrera para protegernos de las agresiones externas. Antes de la llegada del verano, es importante que nuestra piel y su pH estén lo más equilibrados. Si nuestro PH se desequilibra tiende a mostrar un rostro más seco y saldrán más imperfecciones como el acné.

Por ello, es muy importante seguir una rutina de limpieza mañana y noche con productos que respeten y no desequilibren el pH natural de la piel. Es necesario eliminar los restos de maquillaje todos los días ya que estos pueden resecar y estropear la piel, impidiendo que respire adecuadamente. Y aunque no te hayas maquillado, recuerda que las bacterias y la suciedad del ambiente también se acumulan en nuestro rostro. 

Existen múltiples aparatos como cepillos eléctricos, scrubs,  limpiadores, humidificadores, etc. que nos ayudan a purificar y limpiar la piel. ¡Úsalos!.

  • Hidratación

El sol nos deshidrata profundamente, por lo que debemos mantenernos hidratados/as por dentro y por fuera. Además, debes saber que para mantener tu bronceado debes tener una piel hidratada profundamente. 

Hay que beber al menos 1,5 litros de agua al día y aplicar una crema ultra hidratante tras el baño para evitar la evaporación del agua de la piel. A nivel tópico, debemos aplicar productos hidratantes, para mantener nuestras reservas de hidratación naturales, así como para protegerla.

Las cremas hidratantes nos ayudarán a crear una barrera protectora en la piel para evitar la pérdida de humedad, la sequedad e incluso la descamación. Asimismo, recuerda que los sérums ofrecen una hidratación superior ya que son productos puros específicos. No te saltes este paso en tu rutina.

  • Exfoliación

La exfoliación es esencial para  eliminar las células muertas y lucir una piel más sana. Todo esto también ayuda a prolongar el bronceado.  Al mismo tiempo activamos la circulación y la oxigenamos para preparar la piel antes de recibir el sol por primera vez. De esta forma, no incentiváremos tanto la producción de radicales libres, prevendremos el envejecimiento cutáneo. 

Eso sí, recuerda que exfoliar la piel demasiado puede ser contraproducente. Si exfoliamos demasiado podemos volver la piel muy sensible y conseguir que se estropee con más facilidad con los cambios de temperatura. Se prudente.

  • Protección

Lo que no puede faltar en una rutina de preparación solar es usar una buena crema de protección solar a diario. Elige cremas con factor de protección muy alto, que te mantendrán a salvo de los rayos UVB y de los UVA. Y esto lo debemos tener en cuenta todo el año.

Usar protector solar ayuda a frenar el daño celular que causan las radiaciones en nuestra piel, con una barrera de defensa que generan sus propiedades antioxidantes. Eliminarás también las manchas y arrugas ya que disminuirás la pérdida de elasticidad celular.

El protector solar debe aplicarse 20 minutos antes de exponer la piel al sol. Una vez expuesta, deberás reaplicarlo cada dos horas y usar productor resistentes al agua para una mejor absorción.

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