AVENTURA

El viaje más extremo

  • El sevillano Eduardo Fernández-Agüera participará en los tres maratones más duros que existen, en Canadá, Sahara e Isla Reunión. Un equipo de televisión grabará las situaciones de frío, calor y humedad que sufrirá

Hace unos días, el periodista y aventurero sevillano Eduardo Fernández-Agüera se levantó antes del amanecer y se dispuso a correr. Desde Coria del Río (Sevilla) bajó por el Guadalquivir a buen trote, sin parar, hasta llegar a Sanlúcar de Barrameda. Desde allí giró hacia Chipiona y, más concretamente, hacia la playa de las Tres Piedras, su lugar habitual de veraneo. La última parte del camino la hizo andando, pero aun así el esfuerzo había sido de nota. Y no era gratuito: forma parte de la preparación de Fernández-Agüera para participar en algunos de los maratones más duros que existen.

Son tres: Le Grand Raid, en la Isla de Reunión, y caracterizado por sus condiciones de extrema humedad; el Yukon Arctic Ultra, en el norte de Canadá y en pleno invierno ártico; y el Marathon des Sables, en el Sahara marroquí y con una temperatura que puede alcanzar en determinados momentos los 50 grados. Fernández-Agüera ha llamado a este proyecto SYR. Aunque ya conoce qué es el Yukon y el Sables, se propone, en el próximo curso, volver a acometerlos, junto con la prueba de la Isla Reunión. La razón es que la productora andaluza ATN va a rodar la aventura, sobre todo con el objetivo de plasmar la experiencia personal del protagonista. Fenández-Agüera lo explica así: “Son pruebas deportivas, pero mi plan tiene un trasfondo importante de superación personal; en nuestra rutina estamos sometidos a una serie de obligaciones que nos hacen dar lo mejor de nosotros mismos. Yo traslado eso al plano deportivo: ¿nos conocemos a nosotros mismos en unas circunstancias extremas?”.

El pasado mes de febrero ya estuvo en Yukón, considerada la prueba más dura que existe. Son 480 kilómetros a pie que discurren por ríos helados y que se hacen en una sola etapa. Este año, Fernández-Agüera no llegó a acabar la prueba, de ocho días, pues una ola de frío en la que se alcanzaron los 50 grados bajo cero lo congeló literalmente. Sí terminó, por marzo, el Marathon des Sables, no mucho menos duro y enmarcado en la provincia de Errachidia (Marruecos). En un territorio de dunas, pero también de piedra de basalto volcánico y con los bellísimos oasis del sur de Marruecos como marco, Fernández-Agüera recorrió 240 kilómetros por etapas y en régimen de autosuficiencia alimentaria. Su mochila cargaba con todo: comida, saco de dormir, botiquín de primeros auxilios, productos energéticos, etcétera. Lo único que aportaba la organización era agua.

En la próxima temporada, el aventurero sevillano volverá a repetir estas dos pruebas y a ellas sumará, en octubre, el Grand Raid de Isla Reunión, una pequeña porción de tierra mil kilómetros al este de Madagascar. Será la primera en la que esté presente el equipo de rodaje de ATN, compuesto por un total de cinco personas. “Recorremos la isla de sureste a noroeste, en 160 kilómetros, y pasamos por el centro, que está dominado por el volcán Fournaise, activo y que el año pasado entró en erupción”, afirma Fernández-Agüera. La zona, volcánica y también selvática, es un auténtico rompepiernas, ya que al final de la carrera el competidor ha subido hasta 9.000 metros de desnivel acumulado, medida que se obtiene si se suman todos los kilómetros que se han hecho en subida. “Con la complicación añadida de que el camino esté enfangado, pues es muy habitual que llueva”, dice Fernández-Agüera.

Ahora se pone a punto para soportar las pruebas. Entrena entre dos y cinco horas diarias, con una disciplina espartana y bajo las órdenes del preparador físico Óscar Casero. Cuenta, además, con el asesoramiento de Javier Alonso, nutricionista del Centro Andaluz de Medicina del Deporte. El año que viene, cuando el rodaje finalice, Fernández-Agüera podrá contar que él fue capaz de hacerlo. Y, gracias a la televisión, muchos podrán comprobar que esa aventura fue verdad.

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