El dispositivo de rastreo por aire, mar y tierra en busca de supervivientes o cuerpos sin vida de los inmigrantes que naufragaron el pasado lunes en una patera cerca de Cabo Trafalgar (Barbate), se prolongará durante todo este fin de semana, confirmaron a este periódico fuentes oficiales. La razón: una llamada de teléfono a la Guardia Civil hecha ayer por la tarde desde algún lugar de la playa vejeriega de El Palmar, muy cercana a la de Las Plumas, más conocida como de La Aceitera, lugar donde sucedió la tragedia.

Todas las fuentes consultadas por este periódico confirmaron que el comunicante avisó de algo que flotaba a 300 o 400 metros de la orilla. En lo que no coinciden es en si se trata del cadáver de una décima víctima mortal o de otro objeto flotante con aspecto en la lejanía de cuerpo sin vida. También confluyen en que hasta la zona donde fue divisada se desplazó una patrullera del Servicio Marítimo de la Guardia Civil.

Fuentes cercanas al dispositivo de rastreo en el que participan Salvamento Marítimo, el instituto armado, la Junta de Andalucía, Cruz Roja, Protección Civil y Policía Local de Barbate relataron a este periódico que quien avisó a la Guardia Civil fue el piloto de una moto acuática que navegaba por la zona: "Volvió a tierra para llamar a la Guardia Civil y dijo textualmente que había localizado un cadáver flotando a unos 300 metros de la línea de costa". Fue en torno a las 18:00 o 18:30 horas. Según esta versión, la embarcación de la Benemérita rastreó la zona hasta el anochecer, pero no halló nada.

Sin embargo, un portavoz de la Subdelegación del Gobierno en Cádiz aseguró que el supuesto décimo cadáver era en realidad "un bulto" flotando en el mar y que fue de esto último de lo que informó la persona que dio aviso a la Guardia Civil. Aún así, la misma fuente confirmó que el dispositivo de rastreo por tierra, mar y aire se mantendrá durante todo este fin de semana. De hecho, el hallazgo el pasado jueves de la novena víctima mortal cerca del faro de Trafalgar obligó a sostener durante todo aquel día la misma dotación de medios humanos y materiales.

Hasta el momento se han localizado a 15 supervivientes y los cuerpos de 9 fallecidos. Hay que tener en cuenta que la propia Subdelegación del Gobierno en Cádiz y los agentes de la Policía Judicial encargados de la investigación hicieron público que en la precaria embarcación de madera debían navegar hacinadas entre 30 y 40 personas. Si esto fuese así, quedarían por encontrarse al menos seis cuerpos sin vida. O de localizarse, al menos, a media docena de supervivientes.

Cabe una última posibilidad: que los ocupantes de la patera que hayan sobrevivido lograsen eludir las patrullas de la Guardia Civildesplegadas por toda la zona. Y aunque no tranquilos, respiren en algún lugar a salvo.