Acaba de finalizar la primera fase de obras en el futuro parque de Las Aletas. Esta etapa, iniciada allá por el mes de febrero, se puso en marcha por parte del Consorcio obligado por la sentencia del Tribunal Supremo, que remitía al órgano rector del parque a diseñar un nuevo proyecto que no interviniera sobre la zona protegida por el Dominio Público Marítimo-Terrestre y, además, se realizara una posterior reserva demanial de la zona (aún sin definir). Esa petición se espera pueda estar lista en breve tras la entrega el pasado viernes del Informe de Sstenibilidad Ambiental (ISA).

La fase que ahora finaliza se ha desarrollado sobre la llamada zona medioambiental, la que inicialmente era propiedad de la Junta de Andalucía, de unas 120 herctáreas de extensión. A juzgar por los datos ofrecidos por el propio órgano que dirige el proyecto, han sido casi nueve meses de labores sobre el terreno, que ha necesitado de una inversión de 633.024 euros,

Los resultados son, entre otros, los que se aprecian en las imágenes inferiores. Básicamente, se han invertido 513.650 euros para la limpieza manual de residuos dispersos, tales como desbroce y limpieza a mano con cuadrillas y vehículos de obra. Además, han retirado estructuras obsoletas y acopio de escombros y otros restos sin clasificar que había sobre el terreno. Para ello, se han gestionado 2.866,80 metros lineales de tubería de fibrocemento, han retirado 3.525,32 metros cúbicos de escombros, acopios, basuras o tuberías obsoletas.

Para todo se han necesitado 1.710 jornales de personal contratado por la empresa Tragsa, además de 114 jornales de maquinaria y camiones y otros 72 jornales para personal dedicado a la retirada de tuberías de fibrocemento. Más llamativa ha sido la actuación de prospección y excavación para puesta en valor de la zona del Molino de Goyena, que ha contado con un presupuesto de 116.374 euros. Concretamente, los trabajos han consistido en la demolición de estructuras que no eran originales, a la retirada y limpieza de plantas, a la excavación de estructuras aterradas, tratamiento consolidante, saneo y limpieza del entorno, colocación de un dique de defensa, retirada de rellenos antrópicos, protección de huecos de ventanas, aplicación de mortero de cal, cosido de grietas en paramentos y cubrición de restos con geotextil y tierra limpia. Para todo ello han sido necesarios 226 jornales de personal contratado por Tragsa, 35 jornales de maquinaria y camiones y 132 jornales de personal arqueológico.

La casualidad ha querido, sin embargo, que todos estos trabajos se vean en cierto modo empañados por las lluvias de estos días. El agua ha tomado su cauce natural y algunos caminos que habían quedado limpios y a salvo de las crecidas naturales en la zona, han vuelto a ser invadidos por el líquido elemento (como se aprecia en la imagen superior, junto al Molino de Goyena).

A partir de ahora, según explicó el Consorcio en un comunicado el pasado viernes, el ISA será presentado la semana próxima ante el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM), iniciándose así la fase de sometimiento a información pública. Sobre ese informe, el Consorcio de Las Aletas entiende que con su contenido "se garantiza el cumplimiento de las indicaciones medioambientales formuladas por el MARM".

Dice que el ISA "refuerza", además, el objetivo de "conseguir un desarrollo medioambientalmente sostenible del proyecto, compatible con el perseguido impulso de la actividad económico-industrial de la Bahía y siempre respetando escrupulosamente los límites y criterios fijados en la sentencia del Tribunal Supremo".

Una vez que se presente "la semana próxima" ante el MARM se iniciará la fase de sometimiento a información pública. Finalmente, matiza que para "agilizar" este proceso, ya se ha informado de los contenidos de ambos documentos a las distintas administraciones públicas implicadas en el plan, así como a sindicatos y empresarios,