Un jurado juzgará el próximo mes en la Audiencia Provincial de Cádiz a dos acusados de circular en dirección contraria por la autovía AP-4 con una furgoneta robada, provocar un accidente mortal y huir del lugar del siniestro. La furgoneta chocó con el turismo que conducía Juan Pedro C.M., quien trató de evitar la colisión con el vehículo que de pronto se encontró de frente. No pudo y falleció de inmediato. El fiscal sostiene que el automóvil robado lo conducía J.D., para quien solicita dos años y medio de prisión; y que el copiloto era J.J.P., a quien acusa de un delito de omisión del deber de socorro por el que pide seis meses de multa con cuota diaria de 20 euros.

Los hechos sucedieron el 19 de diciembre de 1998. Nueve años después serán juzgados en la Sección Primera de la Audiencia con nueve jurados y un magistrado como presidente del tribunal porque uno de los tres delitos por los que acusa el fiscal en este caso, omisión del deber de socorro, está entre los reservados para la Ley del Jurado.

Los otros dos delitos por los que acusa el fiscal son hurto de uso y contra la seguridad del tráfico en concurso con homicidio por imprudencia. Del hurto están acusados los dos procesados; del homicidio, el supuesto conductor de la furgoneta.

Los dos acusados le robaron la furgoneta en Sanlúcar a un conocido con quien estaban tomando copas, relata el fiscal en su escrito de acusación, que aporta la versión que sigue.

Los procesados decidieron irse a Jerez a continuar con las copas. Ambos iban bebidos. En la parte de atrás, para no dejarlo en Sanlúcar, introdujeron el ciclomotor de J.J.; J.D., que carecía de permiso de conducir, se puso al volante de la furgoneta.

Ya en Jerez, como circulaban de forma irregular, llamaron la atención de una patrulla de la Policía Nacional que intentó que se detuviesen. No hicieron caso. Aumentaron la velocidad y despistaron a los agentes. Pero la patrulla localizó de nuevo la furgoneta y la persiguió hasta que el vehículo entró por dirección contraria en la AP-4. Varios automovilistas que se encontraron de frente con la furgoneta hicieron señales para advertir al conductor pero siguió circulando varios kilómetros. En el 647, en el término de El Puerto, chocó con el coche que conducía correctamente el fallecido. A J.D. lo encontró la Policía a las 5 de la mañana del día siguiente haciendo autoestop; a J.J., en su casa de Sanlúcar.