Cocaína, hachís y medicamentos para potenciar el desarrollo muscular. Éstas eran las sustancias con las que traficaba una red integrada por seis miembros en el ámbito de la Bahía de Cádiz y que ayer, dos años después de su desmantelamiento por parte de la Policía Nacional durante el desarrollo de la Operación Savin, fueron condenados en firme a penas que oscilan entre los dos y los tres años y medio de cárcel.

Los seis traficantes, varios de ellos con antecedentes penales por delitos contra la salud pública, evitaron la celebración del juicio en la Audiencia Provincial de Cádiz toda vez que llegaron a un acuerdo con la Fiscalía y reconocieron ser los autores de los hechos por los que venían siendo acusados. Esta confesión, junto a la atenuante de drogadicción contemplada por el tribunal de la Sección Tercera, les valió para ver rebajadas sensiblemente las penas privativas de libertad finalmente impuestas (de cinco años a tres y medio; y de cuatro, a tres y dos).

Se da la circunstancia de que uno de los ahora condenados es un conocido empresario de la capital gaditana. Regentaba dos negocios de moda en la calle Trille de la ciudad, además de un bar de copas en la calle General Muñoz Arenillas. Era un joven cuyo nombre sonaba con asiduidad en la noche gaditana.

Este caso surgió con motivo de una investigación que funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía estaban llevando a cabo en relación a otras operaciones de tráfico de drogas. Durante las intervenciones telefónicas que se acordaron en el desarrollo de las pesquisas policiales, los agentes descubrieron -a partir de estos 'pinchazos'- otras actividades de distribución de sustancias estupefacientes, razón por la que se abrió una causa aparte. 

A raíz de esa nueva investigación, el Grupo Udyco I Estupefacientes de la Comisaría Provincial detuvo en julio de 2016 a los integrantes de la banda ahora condenada por tráfico de cocaína, hachís y esteroides. En los registros practicados en los domicilios de los implicados en Cádiz, Chiclana y Puerto Real se halló, además de droga, dinero fraccionado, ampollas de Promobolam, Winstrol y Decadurabolin, pastillas varias, una balanza de precisión y teléfonos móviles, entre otros objetos.

Los miembros de esta organización ingresaron en prisión preventiva por estos hechos. El tiempo que han estado privados de libertad les computará en el cumplimiento de la condena decretada por la Audiencia de Cádiz.