El consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Rodrigo Sánchez Haro, ha ratificado su compromiso con "la sostenibilidad ambiental, social y económica del sector de la chirla del Golfo de Cádiz", de manera que el caladero se podrá reabrir en cuanto los informes científicos certifiquen la recuperación de la especie.

Así se lo ha trasladado a la alcaldesa de Punta Umbría (Huelva), Aurora Águedo, en el marco de una reunión en la que ha incidido en que "los tres objetivos van de la mano como una realidad indivisible: asegurar la regeneración de la especie, dar respuesta a las familias que viven de la captura de este bivalvo mientras dure el cierre del caladero y garantizar el futuro de la actividad económica".

16 embarcaciones de Sanlúcar dependen a día de hoy en exclusiva de este molusco

El futuro del caladero impacta de lleno en una flota especializada en exclusividad en la pesca de este molusco y repartida entre Sanlúcar (16 barcos) y los de Isla Cristina y Punta Umbría (con 40 barcos cada uno), en Huelva.

Según ha informado la Junta en una nota de prensa, Sánchez Haro ha reiterado además que "el caladero se reabrirá y se reanudará la actividad pesquera en cuanto así lo permitan los informes científicos" que, elaborados por el Instituto Español de Oceanografía (IEO) evalúan la situación de la especie.

En la actualidad se continúa con la recogida de muestras para estudiar la evolución de la chirla, una cuestión que se analizará este mismo mes de junio en la reunión que mantendrá el Grupo de Trabajo de Gestión de la Pesquería, constituido con la participación de la Junta y representantes del sector.

"Dijimos, ante la dolorosa decisión que tuvimos que tomar en enero ante la contundencia de los informes científicos de seguimiento del Instituto Español de Oceanografía, que no dejaríamos a su suerte a las embarcaciones, ni a sus tripulantes y no lo hemos hecho", ha aseverado el responsable del Gobierno andaluz.