La Confederación de Empresarios de la provincia de Cádiz, a través del Consejo Territorial del Campo de Gibraltar, que me honro presidir, está analizando y comprobando, con preocupación, y también con ocupación, la situación que la crisis sanitaria del Covid-19 está produciendo en el tejido productivo de la comarca.

Gracias a quienes integramos este consejo, estamos tomando el pulso diario a nuestras empresas, desde las grandes industrias de la AGI, los transitarios de ATEIA-OLTRA, las pequeñas y medianas empresas de APYMEAL, las de servicios de la Bahía de Algeciras, comercio, logística-portuaria, medioambiente, construcción, hostelería y turismo, auxiliares, Cámara de Comercio, Colegio de Aparejadores y profesionales.

Todos los sectores económicos de nuestra comarca, al igual que en resto de la provincia, Andalucía y España, se están viendo afectados.

La prioridad ahora es, sin duda, la salud de los ciudadanos. Pero esta pandemia suma daños, muchos irreparable, para empresas y autónomos.

Ante una parálisis económica y de futuro incierto, una situación hasta ahora inédita, para la que no estábamos preparados, las empresas siguen afrontando toda clase de impuestos, tasas, cotizaciones sociales, alquileres, gastos fijos… en una inmensa mayoría sin ni siquiera poder mantener actividad alguna desde el comienzo del estado de alarma. Otras, las menos, con una actividad reducida y mermada por la falta de demanda, la ausencia de suministros e incluso la falta de elementos de protección personal.

"Creemos que las medidas que se están tomando por parte de administraciones son cuanto menos insuficientes para ayudar a la supervivencia de nuestras empresas"

Creemos que las medidas que se están tomando por parte de administraciones son cuanto menos insuficientes para ayudar a la supervivencia de nuestras empresas. Sí, es cierto que la prioridad es combatir la propagación del virus, pero los organismos no sanitarios pueden y deben responder también al enorme problema que se avecina como consecuencia de este parón económico de magnitudes nunca vistas.

Esta semana, la CEC ha dado a conocer un informe -realizado a través de encuesta entre nuestras empresas asociadas- que refleja una pérdida de ingresos media del 75% de media entre los 491 negocios sondeados, de todos los sectores y territorios de la provincia de Cádiz.

Un duro mazazo para el Campo de Gibraltar, que se une a la ya complicada situación de incertidumbre generada por el Brexit o los problemas generados por la falta de infraestructuras para el desarrollo de nuestro puerto de Algeciras y nuestra potente planta industrial.

Entre tanta noticia negativa, queremos mantener a toda costa mensajes de optimismo, unidad, cohesión territorial y esfuerzo.

Miles de empresas, más de 13.000, han presentado ERTE en nuestra provincia. Un dato que alberga la esperanza de que éstas, y sus trabajadores, puedan incorporarse paulatinamente a la normalidad cuando consigamos, también entre todos, arrinconar el virus y empezar de nuevo el despegue, mirando hacia adelante.

"Necesitamos el comodín del tiempo: un paréntesis que incluya [...] la eliminación temporal de gastos, entre ellos los relacionados con obligaciones tributarias y regulatorias"

Como ha señalado nuestro presidente de la CEA, Javier González de Lara, necesitamos el comodín del tiempo: un paréntesis que incluya, además de la ausencia de ingresos en las empresas, también la eliminación temporal de gastos, entre ellos los relacionados con obligaciones tributarias y regulatorias.

Este “tiempo” también debe incluir el combustible que necesita cualquier proyecto empresarial: liquidez a corto plazo.

El círculo virtuoso de la generación de riqueza y empleo se ha parado. Está en pausa. Si el puerto de Algeciras se detiene, lo hacen también cientos de empresas, como estamos comprobando con el cierre de líneas de pasaje con Marruecos.

Lo mismo ocurre con la cadena de suministro de las grandes industrias: nuestras empresas auxiliares.

Debemos estar prepararnos para salir de ésta. Porque saldremos. Con planes para cuando dejemos detrás esta inusual hibernación social y de la actividad productiva.

En esta tarea, las instituciones, agentes sociales y económicos, toda la comarca, podrá contar con la colaboración leal de nuestro Consejo Territorial de las empresas del Campo de Gibraltar.

El reto es enorme, como enorme es nuestra capacidad de respuesta cuando trabajamos unidos.

* Francisco Arroyal Cantera es presidente del Consejo Territorial de la Confederación de Empresarios de la provincia de Cádiz (CEC) en el Campo de Gibraltar