La ciudad y los días

Carlos Colón

ccolon@grupojoly.com

El monstruo con tres penes

Los nazis representaban a los aliados como un cuerpo con cuatro cabezas. Delgado, a la derecha, con tres penes

Sánchez no es gran cosa, pero el frente fascio-populista formado por el PP (pos o neofranquista), Cs (ultraliberal derechizado) y Vox (extrema derecha fascista y hasta nazi según Adriana Lastra) es aún peor. En esto va a consistir la campaña del partido de Sánchez, antes PSOE, para lograr el efecto que ayer se repitió una y otra vez: ¡movilización! Muchos de sus potenciales votantes saben que el partido de Sánchez es lo menos que se despacha en socialdemocracia, que él no es precisamente una luminaria política y que ha demostrado una asombrosa capacidad de desdecirse, mentir y mutar. Pero es preferible un mal socialista a un fascista de la "manifacha". Y nadie dude que desde ya se va a agitar el fantasmón de la ultraderecha y el fascismo como mal mayor al que debe oponerse el mal menor de Sánchez.

Un anticipo ha sido lo de la derecha trifálica y la mucha testosterona de la plaza de Colón de la ministra Delgado. Para ser de letras ha hecho un descubrimiento científico asombroso. Se sabía de la existencia de hombres con dos penes, infrecuente anomalía que se llama difalía; a veces incluso con los dos en perfecto estado de revista. Las redes dan noticia de que uno publicó sus memorias contando los buenos servicios que sus dos poderosos atributos habían prestado a más de mil amantes femeninos y masculinos. Pero no se habían conocido casos de trifalía como el descubierto por la ministra. Por lo menos en humanos porque siempre bicheando por las redes (por lo tanto puede que sea eso que antes se llamaba un "queo" y ahora una fake news) leo que hasta el hallazgo de la derecha trifálica de Delgado solo se había encontrado un caso: un caracol acuático.

En el afán del partido de Sánchez, antes PSOE, de unificar PP, Cs y Vox como un bloque fascio-franquista la ministra ha creado un monstruo al que le ha colocado los miembros viriles de los señores Casado, Rivera y Abascal. Las caricaturas nazis presentaban a los aliados como un cuerpo con cuatro cabezas: americana, inglesa, soviética y judía. La ministra Delgado ha inventado el cuerpo facha con tres penes. Una reducción genital de la política que usa groseramente (las grabaciones de Villarejo demostraron que el esprit de finesse no es lo suyo) un estereotipo de género. Si un político hubiera utilizado la expresión "tricóñica" para referirse a tres políticas lo habrían linchado. Pero ellos tienen bula.

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